El italiano no tuvo rivales y se quedó con la carrera corta de la fecha 19. Este domingo es candidato para la competencia larga, pero debe purgar una doble sanción. Raúl Fernández y Pedro Acosta fueron los escoltas.
Marco Bezzecchi parece empecinado en hacer las cosas más difíciles. El desarrollo de la Aprilia durante la temporada 2025 fue sensacional y se debe en gran parte al piloto italiano porque su compañero estrella, Jorge Martín, se la pasó de quirófano en el quirófano por los recurrentes accidentes. Con el Mundial ya terminado en favor de Marc Márquez, la moto de Noale fue la más poderosa de las dos últimas fechas y, tal vez, el italiano no gane ninguna de las carreras principales. Pero porque solo se metió en problemas. Eso sí, el aplastante éxito del sprint de Australia fue el botón de muestra del nivel de la Aprilia.
Bezzecchi viene de dominar con holgura en Indonesia, en ritmo y velocidad. Por encima de las poderosas Ducati y todo. En Mandalika ganó la competencia corta del sábado, después de complicarse solito porque se quedó casi parado en el primer cajón de partida y cayó al octavo puesto. Desde ahí, el de Rimini protagonizó una gran remontada para vencer. Ya en la carrera del domingo, otro flojísimo pique lo puso en aprietos y llegó el peor error: desbocado, se llevó puesto a Marc Márquez y lo mandó directo al quirófano y a guardarse, casi con seguridad, hasta 2026.
El topetazo al campeón no le salió gratis al italiano de Aprilia: llegó a Phillip Island con una doble penalización de vuelta larga para la carrera del domingo. En los números, para llevarlo a la tierra, casi diez segundos que perderá. Sin embargo, siguió dominando desde el viernes, perdió la pole por nada el sábado y ganó el sprint. Pero, claro, Marco se mete en problemas.
Y tuvo dos inconvenientes en las 13 vueltas del sprint australiano. En el primero, nada tuvo que ver él. ¿Qué pasó? Una gaviota. ¿Cómo? La pista de Philipp Island está pegada al mar y, sí, hay gaviotas. Cuando comenzó la vuelta previa, justo pasaron varias y Bezzecchi se llevó puestas un par. Un ala de la pobre gaviotita quedó encajada en su moto durante toda la carrera. El segundo problema sí fue su culpa En otro intento desbocado de superar a Raúl Fernández (con la Aprilia del satélite Trackhouse) se pasó de largo. Tan abrumadora es la ventaja que tiene por estos días, que descontó la diferencia que había cedido, superó al español en la décima de las 13 vueltas pactadas y le sacó 3s149 en los tres giros finales. Bestial.
Con semejante dominio demostrado, la carrera de este domingo no debería guardar mucha intriga, pero Marco arrastra errores del pasado. Esa doble penalización. Entonces, la gran duda será: ¿podrá con su ritmo impactante recuperar esos diez segundos que cederá? Si se contabiliza que en tres giros logró hacerle tres segundos a Fernández, la cuenta da de sobra. Serán fundamental la largada de Bezzecchi, no puede permitirse otro pique malo, pero Marco se busca los problemas solito como para hacer todo más épico.
El italiano picará desde el segundo cajón, con Fabio Quartararo en la pole. El francés, quien debió agachar la cabeza en la vuelta previa para no cabecear una gaviota, no tuvo ritmo en el sprint. Fue séptimo, a 8s706 de Bezzecchi. El Diablo hizo magia para sacar un vueltón en la qualy (el único que pudo hacer) y parece que hasta ahí llegó todo. Ni siquiera pudo seguir el ritmo de la Yamaha del Pramac de Jack Miller, cuarto detrás de Pedro Acosta (tercero con la KTM).
¿Y Ducati? La marca de Borgo Panigale cortó en Australia la seguidilla de 98 carreras con al menos un representante en la primera fila de partida. Fabio Di Giannantonio, con un modelo 2025 dentro del team de Valentino Rossi, fue el mejor de la casa italiana con el quinto puesto, por delante de Álex Márquez (Ducati de Gresini), quien está a un paso de sellar el subcampeonato. ¿Y las oficiales? Mejor ni preguntar. Sin Marc, allá quedaron, cerrando los dos últimos lugares entre los que completaron el recorrido. Pecco Bagnaia, con tiempos altísimo y totalmente fuera de ritmo, fue 19º, apenas por delante de Michele Pirro, el probador y sustituto del campeón.
