Desde el punto de vista global, el calendario deportivo internacional no podía estar mejor durante este verano. El Mundial de Fútbol Femenino. La Copa Mundial de Cricket del ICC. La International Champions Cup. Y algunas actuaciones históricas en torneos importantes de tenis y golf. Sin embargo, hoy el calendario nos recuerda que, dentro de exactamente un año, comienza el que quizás sea el mayor espectáculo deportivo de todos: los Juegos Olímpicos de Verano de Tokio 2020.
Es precisamente en este punto, faltando 365 días, cuando comienzan a escucharse las historias no sólo de emoción, entusiasmo y anticipación; a la vez, muchos sienten intranquilidad, angustia y temor. Los recientes ciclos olímpicos se han visto manchados por los temores al terrorismo, el virus del Zika, la delincuencia callejera, conflictos geopolíticos y el impacto financiero, social y ambiental de los Juegos a largo plazo. Estos asuntos prácticamente han opacado el propósito original de los Juegos Olímpicos: hacer que el mundo se reúna en paz con el objetivo de celebrar los logros atléticos.
A un año de que Tokio le dé la bienvenida al mundo el próximo mes de julio, el relato se siente diferente en esta ocasión. No se escuchan historias de atletas a quienes se les haya instruido quedarse callados mientras compiten en aguas contaminadas por materia fecal. O la angustia que genera la idea de bombarderos suicidas infiltrándose en las ceremonias inaugurales. Estos Juegos Olímpicos no serán celebrados a 40 millas de distancia de uno de los terrenos más llenos de tensión en todo el mundo.
Por el contrario, la discusión gira en torno a la tecnología japonesa. Más excesos en los gastos. Y los atletas. El protagonismo en los Juegos Olímpicos está a disposición del atleta que lo desee asumir, ya que estos serán los primeros Juegos de Verano en 20 años sin la presencia de Michael Phelps o Usain Bolt. Probablemente, tendremos otros Juegos Olímpicos dominados por noticias relativas a atletas femeninas norteamericanas, bien sea Katie Ledecky, Simone Biles o los equipos femeninos de fútbol, baloncesto y softbol de Estados Unidos. Tokio será sede del regreso a los Juegos del béisbol y el softbol. Y con él, tendremos la presentación de nuevas competiciones en karate, skateboarding, ascenso deportivo y surf.
Aparte de la presencia de un equipo de baloncesto de Estados Unidos repleto de figuras de la NBA, veremos el debut en Tokio de una competencia de 3 contra 3 a media cancha. Pero no comiencen a soñar con LeBron, Steph y Anthony Davis destruyendo al mundo. El equipo de Estados Unidos que ganó la primera edición del Mundial de 3 contra 3 en junio pasado fue liderado por Robbie Hummel, atleta de la Universidad de Purdue y All-American en dos ocasiones.
En lo que respecta a la ciudad anfitriona, Tokio no está inmune a las interrogantes. Cierto, es una de las ciudades más avanzadas del mundo en lo tecnológico, pero existe la preocupación de que no cuente con suficiente alojamiento para los visitantes. A principios de este mes, Tokio experimentó una ola de calor de 40 grados Celsius (104 Fahrenheit), que cobró más de 30 fallecidos y miles de hospitalizados. Existe también la preocupación sobre los niveles de humedad, los cuales alcanzan entre 55 y 60 por ciento en las tardes de verano con suma frecuencia, por lo cual, Tokio podría ser la sede de los Juegos Olímpicos de Verano más calurosos de la historia.
Aparte de todo ello, existe un problema que parece inevitable para todas las sedes Olímpicas en la historia reciente: excesos de presupuesto. A pesar de los recortes, se ha informado que el presupuesto se ha inflado hasta alcanzar $25 mil millones, cuatro veces la cantidad originalmente propuesta.
A pesar de ello, los japoneses siguen invirtiendo en el evento. Literalmente hablando. Mientras que numerosos eventos en Brasil en 2016 y Pyeongchang en 2018 se vieron afectados por una vergonzante cantidad de asientos vacíos, los residentes japoneses han adquirido más de 3.2 millones de boletos para los eventos de los Juegos de 2020 durante la venta inicial hecha a principios de este mes, motivando a los organizadores a preparar otra ronda de venta de boletos en agosto próximo. Distinto a los Juegos Olímpicos anteriores celebrados en Brasil y Rusia, los japoneses no están utilizando al evento como una especie de propaganda política que sirva para demostrar su fuerza como potencia mundial. Por el contrario, desean mostrarle al mundo cómo su país se está recuperando de los devastadores tsunamis de 2011 y utilizar su legendaria hospitalidad para mostrar una ciudad única, pujante y de clase mundial que no se asemeja en nada a lo visto en la última ocasión que se celebraron unos Juegos Olímpicos en dicha urbe, hace 55 años.
Le pedimos a varios periodistas de ESPN de todo el mundo que respondieran varias preguntas clave, a un año de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Los organizadores estiman que los Juegos costarán aproximadamente $15 mil millones. Finalmente, algunas proyecciones indican que podría terminar sumando hasta $25 mil millones. ¿Le queda mucho futuro a este modelo económico?
Eric Gómez, ESPN México: No. Las consecuencias que han debido asumir varias ciudades como Atenas y Río de Janeiro después de haber sido sedes Olímpicas son un triste recordatorio de lo que puede pasar después de haber organizado unos Juegos con un presupuesto inflado. En lo que respecta al futuro, solo existe una cantidad limitada de ciudades y regiones que pueden servir de anfitrionas al evento: lo más probable es que se trate de ciudades con una infraestructura ya existente dedicada a una amplia gama de disciplinas deportivas, sin mencionar alojamiento, opciones de transporte y accesibilidad para los visitantes.
Andrew Withers, ESPN África: Es probable que ya hayamos visto los días finales de este modelo después que el Comité Olímpico Internacional (COI) designara a París y a Los Ángeles como sedes de los Juegos de 2024 y 2028 de forma simultánea en 2017, una vez que otras ciudades retiraron sus candidaturas, alegando costos más altos de lo esperado. Solo podemos aspirar ver en el futuro que otras ciudades candidatas practiquen la responsabilidad fiscal y sigan el ejemplo del alcalde de Boston Marty Walsh, quien se negó a “hipotecar el futuro de la ciudad” para perseguir la sede de los Juegos de 2024. Con toda certeza, los Juegos Olímpicos no irán a África sin un cambio de modelo.
Wayne Drehs, Escritor Senior de ESPN: Por supuesto que no… y el COI está consciente de ello. Es la misma razón por la cual el COI confirió a París (2024) y a Los Ángeles (2028) las sedes de dos Juegos Olímpicos de Verano de forma simultánea hace dos años. Es la misma razón por la cual siguen aceptando candidaturas conjuntas de varias ciudades e incluso de distintos países para Juegos en el futuro. No sorprende que Tokio se haya excedido en el presupuesto. Pueden esperar lo mismo de Beijing en los Juegos de Invierno de 2022. Sin embargo, si Los Ángeles no puede mantener los costos bajos con miras a 2028, los Juegos Olímpicos tendrán un serio problema entre manos.
Matt Woods, ESPN Reino Unido: Si conversas con personas que laboran en el negocio de organización de eventos, existe una atracción creciente hacia eventos regionales en los cuales se reparten las ganancias y se pueden involucrar más recintos ya existentes con el objetivo de reducir costos.
Stuart Randall, ESPN Australia: Parece que el modelo tradicional ha colapsado. Invertir amplias cantidades de dinero, frecuentemente fondos públicos, en un solo sitio, parece ser una tesis insostenible. Las recientes proclamas de “legado olímpico” han demostrado caer en el vacío una vez que el circo de cinco anillos deja la ciudad y las sedes terminan recogiendo los escombros. “Más pequeño” y “sostenible” deben ser las palabras que sirvan de guía para el futuro.
Sharda Ugra, ESPN India: Uno espera que no. Las ciudades candidatas siguen disminuyendo año tras año. El COI terminó distribuyendo los dos Juegos siguientes con las únicas candidatas que quedaban para 2024. Todos están conscientes que toda la perorata que se usa para vender la posibilidad de convertirse en sede de unos Juegos Olímpicos termina yéndose al traste una vez terminado el evento.
Luis Salazar, ESPN Deportes: No. Los Juegos Olímpicos, al igual que la Copa del Mundo del Futbol de la FIFA, se han convertido en eventos que solo pueden ser organizados por un pequeño grupo de países debido a los costes económicos. Cada vez es más complicado de justificar estas inversiones. Los Juegos Olímpicos están obligados a cambiar el modelo y reducir los costos, y confío en que lo harán.
No estarán presentes en estos juegos Michael Phelps o Usain Bolt. A tu criterio. ¿cuál será el atleta o evento que capturará la atención en Tokio?
Withers: Caster Semenya. Se convertirá en un evento de máximo protagonismo por todos los motivos posibles cuando participe en su carrera predilecta, los 800 metros, en la cual es la bicampeona defensora, o corra distancias mayores. Las reglas propuestas por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés), de aprobarse, requerirán que las atletas femeninas con altos niveles de testosterona natural las disminuyan mediante tratamiento médico o cirugías para poder competir en carreras más cortas. De hecho, ella podría convertirse en la noticia de los Juegos Olímpicos.
Ugra: Un sucesor de Bolt será el dueño de Tokio; sin embargo, habrá que vencer primero a Gatlin. Kliment Kolesnikov podría hacer sexy a los eventos de natación estilo espalda y los tiempos de Eluid Kipchoge en la maratón nos mantendrán pegados al televisor hasta el último día. Japón nos podría dar muchas sorpresas.
Jesse Washington, Escritor Senior de ESPN/The Undefeated: Las mujeres dominantes nos aportarán muchas noticias cautivantes en Tokio. Simone Biles desea sellar su legado increíble en lo que serán sus últimos Juegos Olímpicos. Mismo caso de la velocista Allyson Felix. La selección femenina de fútbol de Estados Unidos es una etiqueta viral a punto de explotar. En lo que respecta a los hombres, el nadador Ryan Lochte, tristemente célebre por su mal comportamiento en Rio, regresará a la pileta. Y si el joven esprínter Matthew Boling clasifica a Tokio, se convertirá en el primer atleta norteamericano de raza blanca en memoria reciente en participar en uno de los principales eventos deportivos del concierto Olímpico mundial.
Woods: El velocista americano Noah Lyles no ha sido capaz de lograr la consistencia en los 100 y 200 metros que tuvo Usain Bolt y se mantiene por debajo del campeón mundial Justin Gaitlin en el orden jerárquico. No obstante, hay que darle al norteamericano un año más y quién sabe lo que será capaz de lograr.
Ricardo Zanei, ESPN Brasil: Existe una buena posibilidad de que estos sean los últimos Juegos Olímpicos de Serena Williams, Roger Federer, Rafael Nadal, Teddy Riner, Alex Morgan, Marta, Lionel Messi y Neymar. Mismo caso de LeBron James y Allyson Felix. Con toda seguridad, esos nombres se robarán muchos titulares.
Hiram Martínez, ESPN Deportes: Elaine Thompson. Solo siete atletas han ganado los 100 y 200 metros femeninos en unos mismos Juegos Olímpicos, pero ninguna ha repetido como doble campeona. Thompson tendría una muy buena oportunidad si mantiene su forma de esta temporada. La jamaiquina tiene la mejor marca de 2019 en ambos eventos (10.73 en 100, 22.00 en 200) y solo tendrá 28 años y un mes cuando entre a la pista del nuevo Estadio Nacional en Tokio 2020.
Después de cuatro años marcados por el escándalo que casi llevó al colapso a la gimnasia en Estados Unidos, ¿cómo responderá el equipo de Estados Unidos cuando regrese al mayor escenario para su disciplina deportiva?
Gómez: No hay punto de discusión: Estados Unidos sigue ostentando la mayor colección de gimnastas en todo el mundo. Incluso, cuando el debate en Japón termine cayendo, inevitablemente, en los escándalos antes mencionados antes de los eventos y durante los mismos, existen sólidas posibilidades de que los atletas de ese país sigan disputando la mayor porción de medallas, tal como ocurrió hace cuatro años en Rio.
Alyssa Roenigk, Escritora Senior de ESPN: Estados Unidos seguirá presentando el mejor equipo del mundo, comandado por la mejor gimnasta del planeta y serán fuertes favoritos para hacerse con la medalla de oro. Además, es probable que, bajo las órdenes del nuevo coordinador del equipo nacional Tom Forster, las damas estadounidenses puedan hacer algo que era impensable en el régimen de Bela Karolyi: disfrutar la experiencia.
Withers: Es innegable que los escándalos formarán una parte importante y emotiva dentro del relato de la gimnasia; sin embargo, la multi campeona Simone Biles es teatro taquillero por sí sola. Sus mayores rivales individuales en Tokio podrían ser sus compatriotas norteamericanas, tales como Riley McCusker, Kara Eaker, Morgan Hurd, Sunisa Lee y Grace McCallum. Todas tuvieron destacadas actuaciones en el U.S. Classic en Kentucky y puede esperarse que sean contendientes por la medalla.
Woods: La realidad es que las atletas han logrado aislar y bloquear el ruido para seguir desempeñándose al nivel más alto, al menos en lo que respecta a la gimnasia femenina. Hurd, quien acaba de cumplir 18 años, ha emergido como líder en la competencia general. Ragan Smith y Jade Carey son contendientes para estar en el podio en los aparatos. Y por supuesto, eso es antes de mencionar a Biles, quien ganó seis medallas en el campeonato mundial del año pasado. Apenas tendrá 23 años en Tokio y mantiene las ganas de sumar a las cuatro preseas doradas que ganó en los Juegos Olímpicos de Rio.
Zanei: El equipo de Estados Unidos siempre será una potencia de la gimnasia. El escándalo estremeció al mundo deportivo, pero el talento y el trabajo duro siguen presentes. Estados Unidos será líder del medallero.
El béisbol y el softbol vuelven al programa Olímpico por primera vez en 16 años. ¿Lograrán permanecer estos deportes y por qué?
Gómez: Por el bien del béisbol, que sufre de una popularidad cada vez menor en Estados Unidos, hecho que suele mencionarse frecuentemente, esperemos que logre permanecer en el programa olímpico. Regiones tales como América Latina y Asia Oriental siguen siendo un paraíso para ambos deportes, lo cual significa que tendremos estadios llenos en Tokio en esta ocasión. La gran pregunta es la siguiente: ¿Considerará algún día Major League Baseball la idea de atraer más aficionados de todo el mundo, incluso si eso implica que los peloteros abandonen sus equipos en América del Norte un verano cada cuatro años?
Withers: Ninguno de estos deportes ha logrado permanecer en el programa Olímpico hasta ahora y es difícil ver una razón por la cual puedan lograrlo en el futuro, salvo que aparezcan en unos Juegos escenificados en una región con amplio interés en dichas disciplinas. Probablemente no haya interés en París 2024, pero ¿y Los Ángeles en 2028? Cierto. No son “deportes sexys” y con la excepción de los aficionados apasionados, los partidos en fase de grupos son probablemente una entrada más asequible para los espectadores, que podrán decir que asistieron a unos Juegos Olímpicos.
Woods: El softbol se juega a alto nivel en menos países que el béisbol. Existen muchas disciplinas deportivas dentro del programa Olímpico que no son globales a nivel competitivo (hockey sobre césped, remo, por mencionar solo dos), pero el softbol es un deporte de nicho sumamente reducido y al igual que el béisbol, probablemente su incorporación será una decisión tomada de forma individual en cada edición de los Juegos Olímpicos.
Randall: Es difícil. Existen un millón de razones por las cuales tiene sentido que regresen en los Juegos de Tokio. Pero existe otro millón de motivos por los cuales quizás no estén presentes en París. Con Los Ángeles en fila para servir de anfitriona, se esperaría que el béisbol y softbol puedan reestablecerse plenamente durante varios ciclos Olímpicos; no obstante, sin la presencia de los mejores jugadores de Grandes Ligas, es inevitable sentir que están peleando una batalla ya perdida.
Bonnie D. Ford, Escritora Senior de ESPN: Sin duda. Japón es el sitio perfecto para servir de vitrina al béisbol y el ambiente será una locura. El softbol, al igual que la mayoría de los deportes de equipos femeninos, habrá mejorado en su profundidad y calidad desde su última aparición. Creo que, en esta ocasión, habrán llegado para quedarse.
Damián D. Averhof, ESPN Deportes: El softbol sí, el béisbol no. Cuestión de contextos. El deporte femenino está en alza y el softbol ha experimentado un crecimiento considerable a nivel global. La duración de menos de 2 horas de los partidos juega a su favor, convirtiéndolo muy atractivo para la televisión. Y no se debe obviar que es un deporte popular en dos potencias deportivas mundiales: EE.UU. y Japón. El béisbol pasará sin penas ni glorias. Aunque Japón presente al "Dream Team" de su liga profesional, no evitará el desaire que significa que los mejores peloteros no asistan por estar en la temporada de MLB.
El surf, skateboarding, la escalada deportiva y karate debutarán en los Juegos Olímpicos con el objetivo de entusiasmar y entretener a una nueva audiencia más joven. ¿Cuál de estos deportes tendrá mayor repercusión en tu región del mundo?
Randall: Sin duda, el surf. Australia tiene una rica tradición en este deporte y la oportunidad de competir por una medalla Olímpica ha entusiasmado a la comunidad surfista por estos lados. 17 de las últimas 21 campeonas mundiales han sido australianas y la atención estará puesta sobre Steph Gilmore, Sally Fitzgibbon y Tyler Wright en Tokio.
Woods: Ninguno. Y todos. Nadie sabe con certeza cómo les irá, considerando la diferencia horaria entre Japón, Estados Unidos y Europa, además de las restricciones en los derechos televisivos que mantendrán los resúmenes apartados de una audiencia viral en YouTube.
Gabrielle Paese, ESPN Deportes: El COI va por la ruta correcta al perseguir una audiencia más joven en el surfing. Latinoamérica ya cuenta con una gran base de fans y es un deporte atractivo. Si Instagram es un indicador de popularidad, la estrella de Brasil, Gabriel Medina reina con 7.8 millones de seguidores. En comparación, Kelly Slater, posiblemente el nombre más grande del deporte, tiene 2.5 millones. La estrella del fútbol de Brasil, Neymar, pasa regularmente su tiempo libre junto a Medina. Siete de los 20 mejores surfistas de la World Surf League masculina y tres de las 20 principales del lado femenino son brasileños. América Latina se sintonizará con el surf, ya que el deporte hace su debut en los Juegos Panamericanos esta semana en Lima, Perú, con lugares de clasificación para Tokio 2020 en juego.
Zanei: El skateboarding podría aportar una nueva forma de disfrutar deportes Olímpicos, combinando elementos de la calle y de la cultura pop. La escalada y el karate son disciplinas más extrañas y es difícil saber cómo los asistentes se sentirán atraídos por el surf.
Gómez: Las artes marciales y los deportes de combate en general son importantes en América Latina. Argentina, Cuba y Colombia estuvieron presentes en el medallero del judo en Rio. México y República Dominicana hicieron lo propio en el podio del Taekwondo. Brasil ganó en ambos deportes. La incorporación del karate a las disciplinas Olímpicas significa que todos estos países tienen mayores oportunidades de alcanzar la gloria en estos Juegos.
Ugra: El karate y la escalada deportiva. Hay muchas escuelas de karate con miles de seguidores en la India, muchos más que el caso del Taekwondo o el judo, las artes marciales restantes que estarán en el programa Olímpico. La escalada deportiva está cobrando fuerza y formaron parte de los Juegos Asiáticos de 2018.
Hemos aprendido que, al cubrir los Juegos Olímpicos, no hay mucho que nos sorprenda. ¿Qué te sorprendería ver el próximo verano?
Drehs: Unos Juegos Olímpicos en los cuales las principales noticias giren en torno al desempeño de los atletas, en vez de los escándalos que parecen seguirles. Los Juegos de Tokio parecen tener un buen comienzo, ya que se habla muy poco sobre terrorismo, seguridad, corrupción gubernamental o los temas de derechos humanos que plagaron a sedes anteriores. Pero en los Juegos Olímpicos sólo se necesita de un Ryan Lochte, un oficial Olímpico corrupto, un atleta que haya dado positivo en una prueba antidopaje para que el protagonismo sea arrebatado a quienes más se lo merecen: los atletas. ¿Unos Juegos Olímpicos en los cuales se hable de los Juegos en sí? Esa sería toda una sorpresa.
Ford: El cambio climático, impacto ambiental y los eventos sostenibles serán temas clave. Los temas relativos a los derechos de los atletas están llegando a un momento cumbre. El COI tiene dos sedes sólidas para el futuro con París y Los Ángeles, pero las candidaturas se están haciendo cada vez más problemáticas. Me sorprendería si estos Juegos Olímpicos no se convierten en un referéndum con respecto a cómo deberían ser las próximas ediciones del evento.
Randall: Me sorprendería si conseguimos tener dos semanas completas sin historias de horror provenientes de la Villa Olímpica, el transporte o casos de dopaje. El movimiento Olímpico está en una encrucijada y necesita de unos Juegos libres de controversia y de unos Juegos que personifiquen el famoso Espíritu Olímpico, si aspira a mantener su relevancia en una era deportiva llena de cambios.
Gómez: Con toda franqueza, me sorprendería si algún país saca a Estados Unidos del tope del medallero. Desde el año 2000 sólo ha ocurrido en una ocasión, en los Juegos de Beijing, cuando los anfitriones se alzaron con 48 preseas doradas, mientras que Estados Unidos totalizó 36. Siempre se producen historias asombrosas durante los Juegos, mientras esperamos ver una serie de temas económicos, políticos y sociales que sirvan de contrapeso. Pero, una vez iniciados los eventos deportivos, el dominio de los norteamericanos siempre es lo menos sorprendente.
Ugra: Lo que nos causaría menor sorpresa y mayor deleite sería ver a un medallista de oro japonés en uno de los eventos glamorosos del atletismo. Si India gana su segundo oro individual, el país se pondrá de cabeza.