TOKIO -- Los organizadores de los Juegos de este año en Tokio reiteraron el su mensaje el jueves, al comienzo de dos días de reuniones con el Comité Olímpico Internacional.
Dicho mensaje es: Los Juegos Olímpicos no serán aplazados o cancelados por el brote de un nuevo coronavirus que se propaga desde la cercana China.
"Me gustaría dejar claro de nuevo que no contemplamos una cancelación o posposición de los Juegos. Déjenme dejar eso claro", dijo Yoshiro Mori, presidente del comité organizador, al hablar ante decenas de dirigentes del COI que se reúnen en la capital japonesa.
La inauguración de los Juegos Olímpicos debe llevarse a cabo en poco más de cinco meses. Los relevos de la antorcha olímpica comienzan el mes próximo en Japón, uno de los indicios más claros de que los Juegos están muy cerca.
Aunque no se han registrado en Japón decesos atribuidos al virus, han quedado claros los temores de los dirigentes del comité organizador y del COI. Esta vez, se encontraba sentado entre esos dirigentes el doctor Richard Budgett, director médico y científico del COI.
La semana pasada, Tohiro Muto, director general del comité organizador, reconoció que estaba "gravemente preocupado de que la propagación del padecimiento pudiera restar impulso" a los preparativos para los Juegos.
Un día después dio marcha atrás y confió en que Tokio 2020 seguirá adelante. El jueves, se insistió en ese mensaje.
El miércoles, el virus llevó a la posposición del Gran Premio de China de la Fórmula Uno, previsto para abril en Shanghái. La carrera suele atraer a más de 100.000 personas durante el fin de semana.
Asimismo, el brote ha derivado en la cancelación del campeonato de atletismo bajo techo den Nanjing, así como de torneos de golf, partidos de fútbol y prácticamente todos los deportes en China, incluidas pruebas eliminatorias para los Juegos Olímpicos.
Muchos deportistas chinos se han visto impedidos de viajar para competir en eliminatorias, lo que pondría en duda su participación en Tokio.
Saburo Kawabuchi, exdeportista olímpico y considerado el alcalde de la villa que albergará a 11.000 atletas y a otros miles de colaboradores, sugirió que el verano cálido y húmedo de Tokio frenará la propagación del virus.
"La mayor preocupación es el coronavirus y la infección", indicó Kawabuchi. "Actualmente, no tenemos idea de cuándo se resolverá este asunto. Con base en información que recibimos, parece que este virus no es tan fuerte como el de la influenza. Es susceptible a la humedad y el calor. En Japón, tenemos la temporada de lluvias, que podría derrotar al virus".
John Coates, miembro del COI quien encabeza las visitas de rutina para realizar inspecciones en Tokio, confió en recibir reportes del virus de parte del gobierno japonés, el de Tokio y los organizadores locales, a fin de determinar "las precauciones necesarias que se están tomando".