La selección mexicana de sóftbol hizo historia al clasificarse por primera vez a unos Juegos Olímpicos y este martes aspira a ganar una medalla, cuando dispute ante Canadá el partido por el bronce.
El combinado nacional tiene una peculiaridad detrás de su histórica hazaña, 14 de las 15 jugadoras en la nómina final son nacidas en Estados Unidos, pero con ascendencia mexicana.
“Sé que no nací en México, pero mi papá sí y aún tengo familia ahí, veo a mis abuelos del lado materno, que ahora viven en Estados Unidos, y me encanta escuchar sus historias de la infancia. Estoy muy agradecida que ahora tenemos la oportunidad de estar acá, pero no puedes olvidar de dónde eres, tus raíces. Es increíble ser parte de un grupo de mujeres que están muy orgullosas de representar a este país y asumir la responsabilidad que implica, ha sido muy especial”, compartió la jugadora Sashel Palacios en entrevista con ESPN.
De acuerdo con el reglamento de la Federación, al menos uno de los cuatro abuelos de cada jugadora debe ser nacido en México para poder obtener el pasaporte mexicano y representar así al país en la selección nacional. La gran mayoría de las jugadoras, de hecho, no hablan el idioma y se comunican en inglés.
“Recibimos críticas, por ejemplo, estábamos en Puerto Vallarta en un campamento y un par de nosotras hablamos español, pero la mayoría no, y nos decían cosas por no hablar el idioma o no nacer en México. Pero tenemos que enfocarnos en todo el panorama, estamos jugando por nuestras familias que no tuvieron la oportunidad que tenemos nosotras hoy de jugar este deporte y llevarlo a este nivel”, dijo Palacios, quien es nacida en San Diego, California, frontera con Tijuana.
La única jugadora nacida en la Ciudad de México es Stefanía Aradillas, aunque también estudió la universidad en Estados Unidos y siguió su carrera como deportista en dicho país. De allí, le sigue una lista de 14 jugadoras que nacieron en suelo estadounidense, algunas incluso, como Danielle O´Toole y Dallas Escobedo, representaron en algún momento al combinado de las barras y las estrellas.
Los visores de Selección Mexicana fueron en búsqueda de jugadoras que pudieran formar parte del equipo gracias a que se han desarrollado en un nivel élite de juego dentro del sistema colegial de Estados Unidos.
“La primera vez que me uní a la selección alrededor de 2015, había tres jugadoras que nacieron en México y el ambiente era muy bueno, les encantaba estar junto a nosotras. Enseñan las cosas de forma muy distinta en Estados Unidos y nosotras podíamos traer esa información y ayudar a las otras jugadoras que quizá no fueron a la universidad o no jugaron a ese nivel. Nos ayudábamos mutuamente, ellas nos enseñaban más de la cultura y el idioma y nosotras del juego, por ejemplo, qué hacer en una situación de jugadoras en primera y tercera base”, compartió Victoria Vidales, mejor conocida como Tori.
La decisión ha redituado para México, pues los resultados las han avalado. Además de clasificar a los Juegos por primera vez en la historia de México, las seleccionadas son quinto lugar en el ranking mundial y al menos terminarán en el cuarto puesto en Tokio.
“Para mí, México fue el equipo que me dio la oportunidad cuando nunca siquiera me vieron en Estados Unidos. Siempre ha sido sobre la lealtad y la confianza”, señaló Vidales. “Alguna vez me dijeron que quizá había una oportunidad de probarme con Estados Unidos, a raíz de que ya tenía dos o tres años jugando con México, ni siquiera sé si era verdad o no, pero no lo haría, México ha sido mi soporte todo este tiempo”.
Pese a que algunas jugadoras sí representaron a Estados Unidos, otras como Sashel y Tori, no cambiarían su lugar con el conjunto Tricolor.
“Para mí, México nunca ha sido solamente una opción, es mi elección. No jugaría para otro país, si México no clasificara, no jugaría para Estados Unidos. Ha sido un increíble viaje, he disfrutado cada momento, cada triunfo, cada derrota. Es increíble pensar que la cima de mi carrera pueden ser estos Juegos Olímpicos, con este grupo increíble de jugadoras”, dijo Sashel.
Las jugadoras soñaban con pelear por una medalla que enorgullezca a sus familias, sus raíces y a todo un país y están a un paso de lograrlo.
“Nosotras adoptamos la idiosincrasia de la cultura latina, somos una familia. Eso es lo que nos hace fuertes como equipo”, finalizó Palacios.
ROSTER
Stefanía Aradillas
Ciudad de México, Universidad de San Diego State
Brittany Cervantes
Chatsworth, California; Universidad de Kentucky
Dallas Escobedo
Glendale, Arizona
Universidad de Arizona State
Tatyana Forbes
Redmond, Washington; Universidad de North Carolina State
Chelsea Gonzales
La Habra, California; Universidad de Arizona State
Suzannah Gonzales
Hollister, California; Universidad Cal State Long Beach
Sierra Hyland
Visalia, California; Universidad Cal Poly San Luis Obispo
Nicole Mendes Rangel
Houston, Texas; Universidad de Oklahoma
Taylor McQuillin
Tucson, Arizona; Universidad de Arizona
Danielle O´Toole
Upland, California; Universidad de Arizona
Sashel Palacios
Chula Vista, California; Universidad de Arizona State
Sydney Romero
Murrieta, California; Universidad de Oklahoma
Amanda Sánchez
West Covina, California; Universidad Louisiana State (LSU)
Anissa Urtez
Long Beach, California; Universidad de Utah
Victoria Vidales
La Porte, Texas; Universidad Texas A&M