Los argentinos Adrián 'Tito' Allemandi y Leonel 'Tolito' Aguirre se estrenaron como pareja de una forma soñada y realmente poco habitual: con un título. Este domingo derrotaron por 6-4 y 6-2 en la final del Open de Oeiras, Portugal, a la dupla número 2 del ránking, integrada por sus compatriotas Federico Chiostri y Gonzalo Alfonso, para cerrar una semana redonda en la que también habían vencido a los Nº1, Maximiliano Arce-Franco Dal Bianco.
Para el neuquino Allemandi es el primer título en este circuito, al que llegó hace tres meses tras abandonar el World Padel Tour (WPT), donde era permanente protagonista e integraba al irse uno de los mejores 10 dúos.
Cuando se conoció la noticia de que cambiaba de tour, muchos pensaron que en APT sacaría una diferencia ostensible, que jugara con quien jugara no tendría rivales.
Él sabía que nada sería tan simple.
En marzo le hice una entrevista durante la presentación del Master de Buenos Aires, en el Monumental de River Plate. Fue cauto. Habló de que iba a necesitar "un tiempo de adaptación" y marcó que había "varias parejas consolidadas" que tenían una ventaja importante.
En su cabeza estaba claro.
Tres meses después, y luego de haber cambiado varias veces de compañero, la adaptación parece estar completa. Por lo menos, a juzgar por lo ocurrido esta semana.
En cuanto a la final de este domingo, aunque el resultado no parezca tan contundente, en la cancha no hubo equivalencias. El partido estuvo dominado siempre por Allemandi-Aguirre.
Y la gran figura del encuentro no fue justamente Tito, sino su flamante compañero.
Corrido al revés, el Tolito la rompió toda. Smash, volea, lujos, nada de eso faltó en el repertorio del lomense.
Chiostri-Alfonso, extrañamente apáticos, no pudieron hacer demasiado para contener a ese volcán en erupción. A tal punto que en un puñado de minutos ya se encontraron 5-1 abajo en el marcador.
Desbordados por Aguirre, los N2 se jugaron el resto a enfriarlo. Comenzaron a tirarle todo a Allemandi. Y la táctica dio resultado, porque del 5-1 -quiebre mediante- llegaron al 5-4.
Allí apareció el oficio de Tito. Dejó de arriesgar y se hizo fuerte en su juego de globos y bandejas profundas. Con eso más la magia del Tolito lograron cerrar un set que, de todas formas, nunca pareció comprometido.
Pero no es lo mismo ganar 6-1 que 6-4.
Todo indicaba que Chiostri-Alfonso habían reaccionado y que el segundo parcial iba a ser una verdadera batalla.
Nada de eso.
Los N2 empezaron sacando y cedieron su servicio. Las cartas estaban echadas. Si algún atisbo de duda había llegado a cruzar por las cabezas de Allemandi-Aguirre en el final de la primera manga, ahí mismo se disipó.
El Tolito siguió desplegando todo su arsenal y hasta le sumó la herramienta del amague para que la cuestión ya no tuviera retorno.
Para colmo, Alfonso se mostró en varios pasajes como resignado, cometiendo errores no forzados realmente extraños en él.
Nuevo quiebre en el tercer juego y un plácido recorrido para el neuquino y el bonaerense hasta el festejo final.
El APT Padel Tour continúa su gira europea la semana próxima con el Open de Budapest, en Hungría, que tendrá transmisión en vivo por Star +, y todos los reflectores apuntan a ellos. ¿Será Allemandi-Aguirre la nueva pareja a vencer?