Franco Stupaczuk nació el 25 de marzo de 1996 en Juan José Castelli, una ciudad de Chaco que tiene aproximadamente 28 mil habitantes. Este sábado, en el Mendoza Premier Padel, lo ovacionaron -antes y después de su partido de semifinales- los más de 11 mil espectadores que había en el Estadio Aconcagua Arena.
Desde que empezó el torneo, todos los días hay fans esperándolo en la puerta de su hotel para pedirle una foto, un autógrafo o simplemente saludarlo.
En los momentos libres de esta semana salió a pasear por la ciudad y lo frenaron varias veces por la calle en busca de una 'selfie' con él.
"Cuando todo el estadio empezó a corear mi nombre, se me puso la piel de gallina pero, la verdad, un poquito quería que pararan (se ríe). Soy de un pueblo chiquito de Chaco, de gente no acostumbrada al quilombo, entonces que el público tenga semejante gesto hacia mí es muy lindo pero todavía no me acostumbro; reconozco que el trayecto de poquitos metros que hacemos caminando desde el ingreso al recinto hasta la cancha central, en medio de esa ovación, sentí como si hubiera durado una hora y media (se vuelve a reír)", le cuenta a ESPN.com en una entrevista exclusiva.
Desde adolescente que es una figura preponderante en el mundo pádel, porque ya a los 13 años se empezó a destacar como una gran figura en las categorías menores. Todo indicaba que él sí 'iba a llegar'.
Pero desde aquella época hasta hace dos años, su fama no excedía al ambiente padelístico. De la pandemia hacia acá, el pádel quebró sus fronteras y hoy es un 'boom' en varios países de Europa y Latinoamérica sin demasiada tradición en este deporte.
Las redes sociales también hicieron lo suyo. Y hoy muchos de los que le piden una foto por la calle ya no son los fanáticos históricos del pádel.
"Ayer por ejemplo un señor frenó su auto en el medio de la calle para pedirnos que nos saquemos una foto con el hijo. Y cuando volvimos de jugar cuartos de final, llegamos al hotel a la 1.00 de la madrugada y todavía había gente en la puerta para sacarse una selfie con nosotros. Les dije: "Me quedo acá una hora o lo que haga falta, porque que estén a esta altura de la noche y con este frío por nosotros es increíble. Es lo que está pasando, lo que está generando el pádel", reflexiona el chaqueño, que junto a su compañero, el brasileño Pablo Lima, jugarán este domingo desde las 18.30 (ARG) la final del Mendoza Premier Padel en vivo por Star+ y ESPN3.
Mientras él está instalado hace años en España, porque los circuitos internacionales de pádel tienen su base en Europa, su familia sigue viviendo en Chaco.
Con Franco en Argentina no iban a dejar pasar la oportunidad. Viajaron todos a Mendoza con un agregado: su grupo de amigos de toda la vida también hizo los 1200 kilómetros que separan a Castelli de esta ciudad cuyana para estar cerca de él.
"Sinceramente, que estén acá me mete más presión. Porque quiero ganar como sea para que me puedan ver más partidos", explica.
Pero hay un factor extra: cuando viene a jugar a Argentina se le genera una disyuntiva: "Hace dos años vengo trabajando con mi psicóloga deportiva para poder disfrutar más de mi familia y mis amigos la semana del torneo. Porque yo cuando iba a competir tenía la cabeza solamente en jugar y ganar, y a veces no lograba darles el tiempo necesario a ellos. Estoy aprendiendo a darle un cierre al tema pádel cuando termina el partido y así disfrutar de las otras cosas".
'El Polaco', como muchos le dicen, encontró al lado del brasileño Lima la regularidad que necesitaba. Y este domingo intentará ponerle la frutilla al postre conquistando el primer Mendoza Premier Padel.