El Mundial de Francia 2023 esta a la vuelta de la esquina y en Scrum, un repaso de la cita mundialista del año 2011 disputado en Nueva Zelanda.
Después del éxito que fue Francia 2007, para Nueva Zelanda significó un enorme desafío la organización de la Copa del Mundo 2011. Pero fiel a su cultura, los neozelandeses cumplieron con los plazos casi a la perfección, más allá de algunas dudas en la previa.
Incluso, los anfitriones supieron responder ante una tragedia como fue el fuerte terremoto que golpeó a la ciudad de Christchurch, pocos meses antes del kick off, obligando a reprogramar partidos de los grupos y cruces de eliminatoria directa.
El título quedó en manos de los All Blacks, que conquistaban la Webb Ellis Cup por segunda vez en su historia (la primera fue en 1987, también en casa) al vencer en una apasionante final a Francia por 8-7, eliminando también a Los Pumas en el camino al vencer por 33-10 en cuartos de final.
LA CONSTRUCCIÓN DE UN ÍCONO
En 2009, dos años antes de la RWC, comenzó a levantarse el Forsyth Barr Stadium de Dunedin. Se inauguró en agosto de 2011 y tuvo un costo de 198 millones de dólares neozelandeses, para albergar a 30.748 espectadores.
Allí fue el debut de Los Pumas, el 10 de septiembre con derrota por 13-9 ante Inglaterra, que luego enfrentó a Georgia (41-10) y Rumania (67-3) y también albergó el triunfo de Irlanda por 36-6 sobre Italia.
Desde 2012, el Forsyth Barr se convertiría en la casa de Highlanders en el Súper Rugby. La franquicia de Dunedin transformó el escenario en un verdadero templo y una fortaleza y durante la temporada 2015 obtendría el primer título en su historia.
EL HÉROE MENOS ESPERADO
En el plantel inicial de los All Blacks, Dan Carter fue el apertura titular y Colin Slade su primera alternativa. Pero ambos sufrieron lesiones de ingle que los sacaron de la competencia.
El primero en ser convocado fue Aaron Cruden, quien arrancó en las semifinales ante los Wallabies y en la final ante Francia, pero una lesión en la rodilla no le permitió completar el encuentro.
¿Quién apareció? Stephen Donald, que días atrás se encontraba de pesca, entró desde el banco de suplentes y anotó el penal que valió el 8-7 en el partido decisivo y el título Mundial para Nueva Zelanda.
UN ANTICIPO HISTÓRICO PARA LOS PUMAS
En la previa al partido ante los All Blacks por los cuartos de final, dirigentes de SANZAR anticipaban ante la prensa que pronto llegaría la noticia más esperada para el rugby argentino: el ingreso al Rugby Championship desde 2012.
La presentación oficial se hizo finalmente el 23 de noviembre en Buenos Aires. Los Pumas competirían anualmente con Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica.
LA GRAN SORPRESA
Sin dudas, el golpe menos esperado lo dio Tonga en el Grupo A, al superar por 19-14 a Francia en el Westpac Stadium de Wellington. Los isleños obtuvieron su primer triunfo en la historia ante los galos, que luego se recuperarían hasta disputar la final ante los All Blacks.
LA DECEPCIÓN
Como ya había sucedido anteriormente, la participación de Irlanda dejó sabor a poco. El equipo que había obtenido el Grand Slam en 2009 llegaba para dar pelea y fue primero en el Grupo C, ganándole a Australia por 15-6.
Al haberse adueñado de su zona, los irlandeses evitaron a los Springboks campeones del mundo en cuartos de final y fueron a una llave más favorable ante Gales. Sin embargo, el Dragón ganó 22-10 y se metió en semifinales.
A su vez, Sudáfrica fue otra decepción: los Boks jugaron un flojo partido frente a los Wallabies, perdieron 11-9 y también se fueron a casa temprano, dejando la corona que habían obtenido cuatro años atrás en cuartos de final.
LA FIGURA
Con cinco partidos disputados en la Copa del Mundo, Richie McCaw fue elegido como el Mejor Jugador del Torneo, premio que para muchos debió haber sido otorgado al francés Thierry Dusautoir, otro que dejó una marca enorme con su actuación en Nueva Zelanda.
LOS RÉCORDS INDIVIDUALES
El sudafricano Morné Steyn fue el goleador de la RWC 2011, con 62 puntos, mientras que Vincent Clerc (Francia) y Chris Ashton (Inglaterra) terminaron como trymans, con seis conquistas cada uno. Nueva Zelanda, con 40, fue el equipo que más tries sumó y el que más puntos (301) acumuló.
UN PAÍS PRENDIDO A LA TV
Con más de 2 millones de espectadores, la final entre los All Blacks y Francia fue el evento más visto en la historia de la televisión neozelandesa.