Francisco Ferronato tuvo su debut. El primera línea de Belgrano llegó al seleccionado argentino a los 29 años y, tras el gran triunfo ante Uruguay por la Americas Rugby Championship, dialogó con Scrum. "Estoy feliz y se me pasaron mil cosas por la cabeza, por suerte todo salió bien, el equipo ganó, gustó y goleó".
-¿Qué te pasó por la cabeza previo a entrar a la cancha?
-La verdad es que venía pensando desde el día en el que Felipe me llamó a mediados de enero. Quería que me toque y tuve la oportunidad. Sin dudas fue algo muy emocionante, me pasaron muchas cosas por la cabeza. Ya no soy un pendejo, tengo 29 años y que me toque ahora me puso muy contento y me emociona mucho.
-Pero tu gran año y el presente de Belgrano hacían que merezcas una chance...
-Sí, pienso que esto también se dio por mi realidad en BAC. Sin dudas, haber logrado el campeonato y ser parte de un pack como el del club -que siempre te ayuda- y un equipo que juega bien y gana cosas importantes...hicimos ruido y por eso estoy acá.
-Siempre hablás de lo colectivo, de que uno forma parte de un todo en el equipo. ¿Lo sentís así en Argentina XV?
-Creo mucho en lo colectivo, no en las individualidades. Me toca estar en gran grupo y equipo como lo es en Belgrano y ahora este, en Argentina XV es fenomenal: me da la cancha de debutar a esta edad, insisto y creo que soy parte de un todo.
-Con respecto al partido, ¿qué análisis podés hacer?
-Al principio no me sentía bien por que quería hacer rápido la diferencia en el scrum. Después se ajustaron las cosas y pude mejorar. Creo que tuvimos un partido muy bueno. En particular intenté correr mucho la cancha, que es lo que me piden, pero el protagonista principal fue el equipo.
-¿Podemos decir que tras el sábado te vas conforme con tu debut entonces?
-Conforme con el debut porque el equipo jugó bien, gustó, goleó y ganó.
Pasaron los nervios del debut: "Ferrito" lo vivió como un chico previo al encuentro, pero junto a sus compañeros pudieron darse el gran gusto de ganar en el debut de Argentina XV como local. Ahora le quedan otros objetivos, seguir creciendo en el plantel y, por qué no, cumplir otro sueño...Jugar ante a su familia cuando el seleccionado visite su Comodoro natal para enfrentar a Estados Unidos en tres semanas.
