David Ortiz ayudó a su ciudad adoptiva a recuperarse de los atentados del Maratón de Boston. Y ahora los Boston Red Sox están pidiendo a sus fanáticos que correspondan a su amado ''Big Papi''.
''Todos recordamos que en 2013, cuando más necesitábamos a David Ortiz, él estuvo allí para nosotros'', dijo el lunes el presidente del equipo, Sam Kennedy, un día después de que el veterano bateador fuera herido en un club nocturno en su natal República Dominicana.
''Así que sería apropiado esperar que su comunidad se una a David cuando él más nos necesita''.
Ortiz, de 43 años, recibió un disparo en un club en Santo Domingo. Un equipo de cirujanos lo operó durante seis horas y le extirparon parte de sus intestinos y colon, así como también su vesícula biliar. Ortiz también sufrió daño hepático.
''No dormí muy bien anoche'', dijo Jason Varitek, asistente especial de los Red Sox y compañero de equipo de Ortiz durante casi una década. ''No creo que alguien lo haya hecho''.
El atentado contra Ortiz ocurrió durante el Juego 6 de la Final de la Copa Stanley y robó la atención de la ciudad de la victoria de los Bruins cuando los fanáticos y ex compañeros de equipo buscaban información por la mañana sobre la condición de Ortiz. Los rivales de toda la vida recurrieron a las redes sociales para ofrecer sus mejores deseos. El ex presidente dominicano Leonel Fernández lo visitó en el hospital.
''Nos sorprendió hasta la médula'', dijo Kennedy. ''Fue discordante, impresionante y, francamente, aterrador. Fue un incidente horrible. En este momento, nuestro enfoque se centra exclusivamente en su salud y bienestar [y] para que David vuelva a Boston''.
Los Red Sox enviaron una ambulancia aérea a la República Dominicana para transportar a Ortiz a Boston, donde continuará su tratamiento en el Hospital General de Massachusetts. Kennedy dijo que esperaba que Ortiz llegara a la ciudad el lunes por la noche.
El equipo le pidió a los fanáticos que tuvieran un momento de reflexión poco antes del juego del lunes por la noche contra los Texas Rangers, en Fenway Park, y proyectaron en la pantalla del estadio: ''Enviamos nuestro amor a David Ortiz''.
''Solo espero que cuando llegue aquí todo esté bien, y podamos ver al hombre grande aquí de nuevo con nosotros y llenando de alegría nuestro vestidor'', dijo el manager Alex Cora. ''Es más grande que la vida''.
Ortiz, 10 veces selecionado al Juego de Estrellas y el Jugador Más Valioso de la Serie Mundial 2013, fue uno de los jugadores más productivos --y populares-- en la historia de los Red Sox. Lideró la franquicia, una vez maldita, a tres campeonatos, y se retiró en 2016 con un total de 541 jonrones en su carrera, en el lugar número 17 en la historia del beisbol.
''Alguien me acaba de preguntar cuál era mi recuerdo favorito. Y no son todos los jonrones y hits para ganar que tuvo, y la Serie Mundial'', dijo el lanzador de los Red Sox, Rick Porcello. ''Es cómo abraza a todos en el clubhouse. Sólo esa imponente y amorosa figura que hace que todos se sientan especiales. Eso es algo que no ves mucho. Eso es lo que lo separa, para mí''.
Ortiz se hizo del cariño de los fanáticos locales cuando fue al montículo de Fenway Park después de los ataques en la línea de meta del maratón y proclamó: ''¡Ésta es nuestra ciudad!''
''Todo el mundo sabe lo que pudo hacer en el campo'', dijo el paracorto de los New York Yankees, Derek Jeter, quien ahora es dueño de los Miami Marlins. ''Lo que ha significado para la comunidad, no sólo en el deporte de Boston en general, para la República Dominicana -- éste es un chico que es amado en todo el deporte y en todo.
''Obviamente, es un ícono en el Monte Rushmore en la ciudad de los atletas de Boston, pero es el tipo en la República Dominicana'', dijo el asistente del gerente general de los Red Sox, Eddie Romero. ''Es más famoso que cualquier presidente. Cuando la gente piensa en República Dominicana, piensa en David Ortiz, piensa en Pedro Martínez''.
El segunda base de los New York Mets, Robinson Canó, un compañero dominicano, agregó: ''Es un ídolo para todos nosotros''.
Otro famoso atleta de Boston que también es oriundo de República Dominicana, el lanzador del Salón de la Fama, Pedro Martínez, fue uno de los primeros en ofrecer oraciones por el legendario bateador.
El abridor de los Medias Rojas, David Price, jugó con Ortiz durante su última temporada y dijo que el ícono de Boston lo recibió con los brazos abiertos.
''No quería que fuera nada sobre mí y él; quería que fuera todo lo del alrededor. Y no quería que fuera todo sobre él; quería que fuera sobre nosotros como equipo. Así que-- no tengo nada más que amor y respeto por 'Big Papi', y él lo sabe muy bien'', dijo Price.
Mookie Betts hizo eco de ese sentimiento el lunes y dijo que Ortiz lo hizo sentir bienvenido y en casa durante su año de novato.
''No puedo hablar por otras personas, pero para mí, él es como un hermano mayor y un padre al mismo tiempo'', dijo Betts.
El efusivo apoyo para Ortiz se extendió mucho más allá de sus ex compañeros de equipo el lunes. El presidente Barack Obama y el mariscal de campo de los New England Patriots, Tom Brady, se encontraban entre los que enviaron buenos deseos.
Los Medias Rojas retiraron el número 34 de Ortiz en 2017, menos de un año después de su jubilación, y una calle fuera del estadio de beisbol fue rebautizada en su honor. Permanece vinculado al club de pelota en un papel especial que incluye la tutoría de jugadores actuales, reclutar agentes libres y hacer apariciones especiales.
The Associated Press contribuyó con este reporte.