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Se despertó a tiempo

El equipo de Lamas pretende volver a festejar en el juego ante Nigeria EFE

Buena victoria ante Túnez. No tanto por el juego desplegado, un tanto desprolijo por momentos, sino porque la victoria pone al equipo a un paso de clasificar a cuartos.

Son partidos que a priori parecen fáciles. Cuando se piensa en Túnez y su historia basquetbolística, no se encuentra mucho de donde rascar, pero, como demostró el equipo rival en el primer cuarto, nunca se sabe. Y la sorpresa no avisa, generalmente viene en envase de dos litros de cachetazos, y dos horas después te preguntas que pasó, cómo paso, como podría haberse evitado... Por suerte esta vez no fue así y Argentina se despertó a tiempo.

¿Por qué? Porque cuenta con Manu Ginobili, y eso es una gran ventaja. Indudablemente. Ante un inicio con dudas y desaciertos, Manu, prácticamente solo, recompuso la situación, enderezó el camino, y recobró el control del juego para nuestro equipo. Los demás lo siguieron, claro. Sobre todo desde la defensa, con el ingreso de Pancho Jasen, que dio y da equilibrio y defensa cada vez que está en cancha, a veces imperceptible si uno sigue sólo la pelota y no amplía el panorama. De hacerlo, uno puede ver la cantidad de pequeñas cosas que le da al equipo. Me parece, y es mi opinión, que se va ganando el derecho a pisar el parquet un poco más con cada partido que pasa.

Sigo. Al rival se lo ajustó en defensa y se le acabaron las balas. Tamaña eficacia en el primer cuarto fue insostenible a lo largo del juego. Argentina es mucho más equipo y se lo hizo saber una vez recuperada la desventaja. El resto fue un trámite que dejó cosas positivas, una vez más, si tienen continuidad en los próximos partidos.

Turno para hablar de lo mío. La base. Hoy pasó lo inesperado y Facundo respondió muy bien.

Campazzo sumó 40 minutos de experiencia internacional. Es mucho tiempo y fue de menor a mayor. A ver, a esta altura creo que no está en duda la capacidad, la entrega y el talento de Facundo para jugar a este nivel.

Su progreso pasa por el tiempo, el roce y el entendimiento del juego internacional, de los torneos cortos. Pero sobre todo por el tiempo. Porque a este no se le gana, sólo se lo puede transitar. Y hoy Facu lo experimentó en gran dosis.

Tiempo porque es joven, tiene 21 años, y sólo la acumulacion de experiencias como la del partido de hoy le daran la capacidad de adelantarse a lo que viene. Esto le dará la tranquilidad y control de la situación, la pérdida del asombro ante lo nuevo o inexplorado. Cuando conocemos adquirimos la capacidad de comparar, de distinguir. Eso es la experiencia. Simplemente porque son situaciones que se vivieron una y otra vez.

Facu posee el maravilloso don de la juventud, y eso en este deporte es vital. Sólo le falta adquirir tiempo, transitarlo. Por eso, cuanto antes Facu adquiera experiencias, dentro y fuera de la cancha, a este nivel, va a estar listo para tomar la posta. La oportunidad de hoy la valorará con los años.

Supongo que Pablo (a quien le mando un gran abrazo y deseo de pronta recuperación, mientras mi mujer Andrea me relata el dolor de los cólicos habiendo pasado ella por algo similar, duele de sólo escucharla) le habrá hablado y transmitido tranquilidad.

Jugando de inicial en la selección siempre me repetía a mi mismo: al lado de estos monstruos, menos es más.

Me encantó el ingreso de Marcos Mata, lo estaba esperando porque le puede dar mucho al equipo. Una vez más, juventud divino tesoro. Desgasta a los rivales con su físico y en ataque entiende el juego y tiene paciencia.

Por ultimo, un grandísimo abrazo a Huguito Sconochini, allÍ presente relatando por ESPN. Una alegría enorme escucharlo, aparte de grandísimo jugador, mejor persona. Abrazo grande Hugo.