<
>

Al "archivo muerto"...

Un nuevo caso de índole racial que termina sin una resolución en el futbol mexicano. ¿Ni un video, ni un testigo, ni una voz? Nada ayudo a una fortalecida Comisión Disciplinaria a encontrar pruebas que sustentaran el dolor y las lágrimas de un futbolista y la agitación de un club como Santos. Es una pena porque se trata de un tema delicado, que seguramente existe en nuestro futbol y que nunca encuentra las condiciones para ser perseguido y juzgado con la fortaleza que lo amerita. El San Luis-Santos de la Fecha 7fue todo un escándalo que volvió a terminar en el "archivo muerto" del futbol mexicano…

SAN DIEGO -- Tan sólo 48 horas después de una decisión histórica que le fortaleció y corroboró como un órgano independiente, la Comisión Disciplinaria del futbol mexicano tuvo que doblar las manos en el presunto caso de racismo en San Luis Potosí.

Por falta de pruebas, se ha considerado improcedente el reclamo del club Santos y de su futbolista, el ecuatoriano Félix Torres. Un nuevo caso de un supuesto tema racial ha sido archivado en el futbol de México. Pero la verdadera pregunta que debemos hacernos aquí es: ¿Realmente Santos, sus futbolistas, sus dirigentes, su propietario inventaron toda esta historia? No lo creo. Me niego a creerlo.

Y lo que es todavía más extraño aún es que en un estadio sin aficionados, con cámaras de televisión, micrófonos ambientales, cuerpo arbitral de cuatro personas y un comisario, nadie haya sido capaz de registrar los aparentes insultos de índole racial. Lo cual, me lleva a una hipótesis: el tema fue minimizado y hasta olvidado por los árbitros ya que se trata de uno uso común en México. Llamarle a una persona por su color de piel, sea de forma cariñosa o despectiva, es algo que en México se defiende. Y está mal, hay que entender que está mal, a las personas debemos llamarlas por su nombre y punto.

Pudo haber sucedido que los árbitros y el visor no hayan registrado nada porque es un léxico común y corriente en los campos de juego. Recuerden cómo las autoridades futbolísticas mexicanas defendieron durante mucho tiempo que el grito que hacían los aficionados cada vez que despejaba el portero no poseía un carácter homofóbico. Para ellos, era parte de los usos y costumbres del mexicano. ¿Podría suceder lo mismo en un tema de orden racial? No lo sé, pero lo que sí es realmente extraño es que Santos haya hecho todo un escándalo por el tema y que, al final, se conformase con el hecho de que no hubo una prueba que revalidara su alegato.

Es otro de los muchos incidentes raciales que se va al "archivo muerto" del futbol mexicano. Hubo una acusación fincada en el sufrimiento, en las lágrimas de un ser humano más que de un futbolista, pero increíblemente, no testigos, no videos, nadie que diera un paso al frente, no hubo nada que lo pudiese comprobar. Quien sabe qué se esconde detrás de esta historia, pero no es algo bueno, estoy seguro que no hay nada bueno…

@Faitelson_ESPN