En el 30 aniversario de su desaparición, el Muro de Berlín cayó una vez más, esta vez en el Olympiastadion, donde Hertha Berlin recibió a RB Leipzig.
Durante la semana, la ciudad de Berlín celebró la revolución pacífica que condujo a la reunificación de las dos Alemanias en 1990. Los eventos tuvieron lugar en toda la ciudad antes de las celebraciones principales del sábado, que incluyeron la destrucción de un muro en el campo Olympiastadion antes del choque de la Bundesliga de Hertha y Leipzig.
Treinta años después de la caída del Muro de Berlín, Hertha construyó un muro en la mitad de su campo para simbolizar la división del país hace tres décadas.
"Zusammen gegen Mauern, zusammen für Berlin" - unidos contra los muros, unidos por Berlín - fue el mensaje escrito en el muro. En la pantalla gigante se mostraron discursos famosos de los ex presidentes de Estados Unidos John F. Kennedy y Ronald Reagan.
"Sr. Gorbachov, derribe este muro", dijo Reagan mientras los fanáticos en el Ostkurve revelaban una pancarta gigante de la Puerta de Brandenburgo. Arriba estaba escrito: "Los muros no pueden resistirnos a los berlineses".
Los jugadores de Hertha y Leipzig salieron del túnel junto a un Trabant, diseñado por la famosa marca de automóviles de Alemania Oriental del mismo nombre, que atravesó la pared mientras los jugadores se alineaban.
Los restos del muro fueron llevados al sonido de "Heroes", la canción que David Bowie grabó en los Estudios Hansa de Berlín en 1977.
"Muchos de nuestros miembros y fanáticos se vieron afectados directamente cuando se construyó el muro en 1961", dijo el ejecutivo de Hertha, Paul Keuter, a ESPN. "Como un club con una larga tradición y que es una parte integral de Berlín, esos momentos clave de la historia de nuestra ciudad simplemente juegan un papel para nosotros".
"La historia muestra que los muros, especialmente aquellos en nuestras mentes, nunca han sido una buena solución. Por el contrario, traen sufrimiento y daño. Aquí en Berlín sabemos que los muros no son la solución".
Hertha fue fundada a fines del siglo XIX en lo que se convertiría en el este después de la Segunda Guerra Mundial y luego se trasladaron al oeste.
Leipzig, su oponente en la jornada, es un equipo de fútbol con sede en el antiguo este, pero está financiado por una gigante marca austriaca de refrescos.