El arranque del partido en el que River Plate venció a Boca Juniors por 1-0, tuvo una de las amarillas más rápidas de la historia de los Superclásico. Federico Gattoni le cometió una infracción a Edinson Cavani y quedó condicionado muy rápidamente.
El Xeneize movió para atrás, tiró un pelotazo y el defensor goleó con las manos de atrás al delantero uruguayo a los 5 segundos.
Nicolás Ramírez no dudó y le mostró la amarilla inmediatamente ante las protestas de todos los jugadores de Boca.
Esta es una de las amarillas más rápidas de la historia de los Superclásico.