Logró el objetivo. Lanús empató 3-3 con Barracas Central de visitante, en el Estadio Tomás Adolfo Ducó, de Huracán, por la 27ª y última fecha del Torneo de la Liga Profesional. Así, el Granate consiguió el boleto para disputar la CONMEBOL Sudamericana en 2025, ya sin depender de otros resultados.
El cambiante partido fue arbitrado por Nicolás Lamolina. Lanús, dirigido por Ricardo Zielinski, había llegado al clásico del Sur contra Banfield con tres empates sin goles, afuera de la Sudamericana y peleando por entrar a la próxima edición, pero lo ganó y creció en confianza. Y este viernes logró el punto que necesitaba al igualar con Barracas.
Después de quedar eliminado ante Cruzeiro en semifinales de la Sudamericana, en La Fortaleza, no perdió en los ocho encuentros siguientes. Ganó dos, empató tres y se impuso en los dos siguientes, destacándose los éxitos de visitante sobre Boca, Banfield y Talleres, equipo cordobés que es uno de los líderes con Vélez, además de haberle igualado al Fortín en Liniers. El octavo de la lista fue este contra el Guapo, en Parque Patricios.
El Granate mejoró el 15º puesto en el certamen, con 36 puntos, mientras que Barracas arribó siendo último (28º), con solo 22 unidades, siendo el equipo con menos triunfos, con cuatro. Con esta igualdad, justo alcanzó a Banfield con 23. Por su parte, Barracas, conducido por Rubén Darío Insúa, apenas ganó uno de sus siete últimos duelos oficiales (frente a Argentinos) y ahora acumuló tres empates en fila.
El partido arrancó con goles y a la vez accidentado por choques entre los protagonistas, con golpes fuertes y dos cambios forzados en el visitante. A los cuatro minutos, el delantero Facundo Bruera abrió la cuenta para el Guapo, de cabeza, y a los siete ya empató Felipe Peña Biafore, por la misma vía, pero tras un córner, para Lanús. En el medio, Nahuel Losada, el arquero del Granate, casi se hace un gol en contra y el local pudo ponerse 2-0, ya que el sol de frente le jugó una mala pasada y no vio bien la pelota, aunque pudo recuperarse con lo justo.
En el cierre del primer tiempo, se dio una situación increíble: Ramiro Carrera se perdió un gol insólito, ya que Walter Bou se la bajó de cabeza al volante, quien eludió al arquero de Barracas Central y solo tenia que empujarla para marcar el 2-1 de Lanús, pero le pifió a la pelota y la mandó afuera. No podía entenderlo él, ni sus compañeros ni el técnico. Y los rivales quedaron agradecidos.
Tras una gran acción, Lanús lo dio vuelta a los dos minutos del segundo período, con el gol marcado por Eduardo Salvio, en una jugada en la que brilló con un toque genial Marcelino Moreno. El árbitro no lo convalidó en primera instancia, ya que el juez de línea decretó una posición adelantada, pero el VAR mostró que no hubo offside y el tanto fue confirmado. Y ahí sí el Granate selló el 2-1.
Pero poco le duró la alegría a la visita, ya que Rodrigo Insúa, hijo del entrenador, igualó 2-2 con autoridad para Barracas Central, a los 13 minutos. Enseguida, a los 15, llegó otro festejo, ahora de Lanús, tras un gran cabezazo de Bou, que le dio nuevamente la ventaja al equipo de Zielinski. Y a los 24 hubo otra celebración, ahora por parte de Alan Cantero, del local, para marcar el 3-3. Así, en un duelo cambiante, de ida y vuelta en gran parte de su desarrollo, quedaron a mano y el que hizo negocio fue Lanús, que volverá a jugar un certamen internacional.