MAR DEL PLATA -- El capitán de Gimnasia y Esgrima La Plata, Lucas Licht, responsabilizó al árbitro Silvio Trucco por el escándalo entre los jugadores que forzó la suspensión en tiempo agregado del clásico amistoso disputado en Mar del Plata en el cierre de los torneos de verano.
"Se le escapó a Trucco, se le fue de las manos. Fue una vergüenza, sin sentido. Vinimos a jugar un partido de fútbol y terminamos así", lamentó el lateral izquierdo después de la gresca suscitada sobre el campo de juego del estadio José María Minella.
Licht entendió que la expulsión "equivocada" del arquero de Gimnasia Enrique Bologna fue determinante para desatar la violencia entre los jugadores, que se corporizó al rato cuando el juez le mostró tarjeta roja al mediocampista de Estudiantes Santiago Ascacibar por una fuerte entrada sobre Antonio Medina.
En ese instante, los jugadores de Gimnasia reaccionaron y se produjo una pelea masiva entre titulares, suplentes y auxiliares de cada delegación.
Truco decidió la suspensión con el marcador 1-0 en favor de Estudiantes, que jugó con 10 hombres los últimos 35 minutos por una temeraria patada del uruguayo Alvaro Pereira a la cabeza del defensor Facundo Oreja, que dejó la cancha en ambulancia.
El clima del clásico ya estaba enrarecido por dos interrupciones transitorias que dispuso Trucco por las banderas de Estudiantes que exhibió la parcialidad "tripera".