Volvió a hablar. Reapareció Ricardo Centurión tras el peor momento de su vida, cuando hace poco más de un mes falleció su novia, Melody Pisani. El jugador de Vélez Sarsfield habló en radio, en el programa Closs Continental, y se mostró tal cual está, realmente triste, muy dolido.
Las frases que dejó la charla con Centurión, en su vuelta a escena:
“Yo creo que salir es muy difícil, por lo que pasó y lo que me está pasando. Es muy pronto, es la primera vez que salgo a hablar. Acá estoy con un poquito más de fuerza. Fue hace un mes y una semana”.
“Estoy muy enojado, muy dolido. Tengo un montón de sensaciones, más con Dios. El es el que elige cuando se tiene que ir uno. Hoy me sale eso. Estoy con ese pensamiento y ese dolor”.
“Preguntas que jamás van a llegar las respuestas. Es un sueño del que nunca voy a despertar. Creo que no se va a revertir nunca esta herida. No lo vamos a superar. Estuvimos cuatro años viajando y seis años y medio entre que nos conocimos. Ella peleó en San Pablo contra el cáncer y lo superó. A los 13 años estaba operada del corazón”.
“Fue una guerrera. Me enseñó todo. Le decía que la amaba. Yo cometí muchos errores, pero la que siempre estuvo a mi lado fue ella, mi cable a tierra. Siempre estuvo, nunca me soltó la mano. Tenía mucho por vivir. Lo de mi abuela me dolió, tenía 74 años, pero una persona de 25 años... fue lo peor de mi vida. No podíamos tener hijos porque yo me había operado y ella por su problema”.
“Era lo que más deseábamos, tener hijos. Era todo un conjunto de cosas. Somos muy aferrados a nuestros sobrinos. Estábamos viendo el tema de la inseminación pero no se pudo dar”.
“Siempre le agarraba dolor de pecho hasta que se le pasaba, más de eso no. Vivía su vida normal, pero con muchas medicaciones. Esa noche no pasó nada. Fue una muerte natural. Le agarró un paro cardíaco manejando”.
“Nosotros estábamos en Madero, solos, yo había conseguido un permiso para los dos para ir a Avellaneda para estar más en familia, para pasarla mejor. Dijimos de esperar medianoche. Yo me fui adelante y ella salió después. Llegó a la casa de mi madre todo bien. A las 6 y media, cuando se va a Banfield a su casa, ahí fue donde le pasó todo”.
“A ella los últimos análisis le habían dado mal. Habían pasado un montón de cosas. Mismo cuando salimos campeón con Boca, íbamos a hacer un viaje y no pudimos. Era una persona especial. Era una persona muy de riesgo ella. Rompimos la cuarentena y nos fuimos a la casa de mi mamá”.
“Mucho no tocaba el tema. Ella siempre me decía que en un momento se iba a ir. Yo sentía que la disfrutaba pero sabía que no la iba a tener más. Era una leona que aguantaba cualquier cosa. Tenía unas ganas de vivir la vida terribles. Ella me enseñaba un montón de cosas”.
“Estoy muy agradecido con la gente. El público argentino me ha golpeado en muchas situaciones sin saber pero me gustaría que mi caso quede. Las personas como nosotros, que venimos de tan de abajo y con tan pocos recursos y llegamos a lograr lo que logramos. Yo ya había perdido un amigo, mi viejo...”.
“Tuve un montón de llamados de colegas, de árbitros, de un montón de gente que me acompaña en este dolor. No tuve la oportunidad de agradecerles a todos y aprovecho ahora. Yo y mi familia nos sentimos muy apoyados. No se le desea a nadie, es lo peor que puede pasar. Lo mejor que me puede pasar es que vuelva el fútbol y los entrenamientos. Yo no encuentro otra salida ahora”.
“La vida continúa. Esto es muy reciente, pero de acá a dos años capaz estamos hablando de otra cosa. Yo veo, vi y sigo viendo muchas cosas injustas. Estamos ayudando a un comedor de la villa y yo no vendo nada. El otro día subí pero si es por mi no subo nada. A pesar de todo, sigo teniendo a mi mamá con salud y a mis hermanas”.
“Se ha comunicado Caballero conmigo. No me dijeron nada del contrato. En junio se termina y tendría que presentarme en Racing. Sé que del lado de Vélez quieren hacer el esfuerzo pero no me senté con nadie personalmente”.