Japón, que el jueves empató 2-2 con Uruguay en el Arena do Gremio de Porto Alegre, arribó este viernes a Belo Horizonte y tuvo un entrenamiento liviano y sin exigencias en el estadio Independencia Raimundo Sampaio con miras al partido del lunes ante Ecuador.
Los nipones salieron al campo a las 19.00 y, separados en pequeños grupos, hicieron pases a uno o dos toques procurando que el balón no cayera al piso mientras esperaban el inicio formal de la práctica.
El entrenador, Hajime Moriyasu, los reunió y les habló durante unos cinco minutos. Luego, los que jugaron ante Uruguay trotaron lentamente alrededor del campo antes de ir al gimnasio para hacer trabajos regenerativos.
El resto hizo ejercicios livianos, de movilidad, sin mucha exigencia, al principio sin la pelota y luego con ella.
Los jugadores, pese a un notorio cansancio, parecían alegres y relajados tras el empate conseguido ante Uruguay.
La segunda jornada del Grupo C la definen hoy Ecuador y Chile en el estadio Fonte Nova, de Salvador.