Argentina y Chile jugaron en los últimos tiempos partidos que quedaron en la historia. Nada menos que dos finales de Copa América en 2015 y 2016, que ganó la Roja, le dan a este encuentro un condimento especial.
Se sabe que la Argentina tiene como rivales históricos a Brasil y a Uruguay, y que Chile tiene una disputa especial ante Perú, en un derbi conocido como el clásico del Pacífico. Pero sin dudas la rivalidad creció y mucho entre argentinos y chilenos.
Las dos selecciones vienen de medirse por Eliminatorias hace pocos días, en Santiago del Estero, partido que terminó igualado 1 a 1. Ahora, volverán a verse las caras en el debut de ambos equipos en esta Copa América.
EL PRIMER TÍTULO DE CHILE
La Copa América de 2015 fue especial para Chile, porque fue la primera vez en su historia que pudo quedarse con el título continental. Y lo logró en su casa, como local, tras derrotar en los penales a los dirigidos en ese entonces por el Tata Martino. Tras 90 minutos parejos y 30 minutos más de alargue, la efectividad desde los 12 pasos terminó con la sequía de la Roja, dirigida por Jorge Sampaoli. Alexis Sánchez, Gary Medel y Arturo Vidal, entre otros, se impusieron ante una Argentina que era favorita y que con Messi como máxima figura venía de ser subcampeona del Mundial 2014. El 4 de julio de 2015 fue, sin dudas, un día histórico para el fútbol chileno.
OTRA ALEGRÍA PARA LA ROJA
El 26 de junio de 2016, casi un año después de su primer título, Chile conquistaría el segundo, y nuevamente ante la Argentina. Otra vez lograría el título desde los penales, tras un nuevo empate sin goles en el tiempo reglamentario y en el suplementario. Martino seguía siendo el DT argentino, pero en Chile, Juan Antonio Pizzi había sustituido a Jorge Sampaoli. Casi las mismas caras en la cancha estuvieron frente a frente, y si bien nuevamente la Argentina llegaba como favorita por contar con Messi y por el nivel de juego, la suerte en los penales volvió a ser para Chile. La tercera final perdida de manera consecutiva (sumando la del Mundial 2014) fue demasiado para la Pulga, quien tras el partido anunció su salida de la Selección.
REVANCHA ALBICELESTE
Luego de las dos derrotas en finales por Copa América, la edición de 2019 en Brasil iba a tener a ambos equipos nuevamente frente a frente, aunque en este caso por la disputa del tercer puesto. Argentina venía de quedar eliminada por Brasil, y Chile de perder en cuartos de final ante Perú. La albiceleste de Lionel Scaloni se dio el gusto de ganar este partido por 2 a 1, con goles de Agüero y Dybala, mientras que el descuento chileno fue de Arturo Vidal. El encuentro es recordado por el encontronazo entre Messi y Gary Medel, donde el árbitro paraguayo Mario Díaz de Vivar expulsó a ambos jugadores. Una reacción del juez que pareció exagerada, sobre todo teniendo en cuenta que la Pulga sólo se había plantado firme ante la reacción provocadora del Pitbull.
UNA ALEGRÍA DE LA MANO DE BIELSA
El historial es muy favorable a la Argentina. Por eso, el triunfo del 15 de octubre de 2008 fue muy celebrado por la parcialidad chilena. Ese día, con Marcelo Bielsa en el banco de la Roja, Chile ganó 1 a 0 con una destacada actuación de Fabián Orellana, y así fue marcando el camino que iba a llevar al equipo del Loco al Mundial de Sudáfrica 2010. Sin dudas fue un partido especial, ya que se trató de la primera victoria oficial de Chile ante la Argentina. Para Chile ese encuentro fue un quiebre en los enfrentamientos entras ambos equipos, y también pensando en jugar de igual a igual frente a otras selecciones importantes; para la albiceleste, el comienzo de un camino lleno de dudas rumbo al Mundial 2010 que iba a dirigir Diego Armando Maradona.
EL LOCO Y UN FESTEJO CON ARGENTINA
El 29 de marzo de 2000 arrancó la era Bielsa rumbo al Mundial de 2002. El Loco estaba en el banco argentino y el debut por Eliminatorias no pudo ser mejor: 4 a 1 ante Chile en el Monumental. Los goles del conjunto argentino fueron marcados por Batistuta, Verón (dos) y el Piojo López, mientras que el empate parcial fue de Rodrigo Tello. Fueron unas Eliminatorias donde la albiceleste se lució de punta a punta, llegando como líder y sin pasar sobresaltos a Corea Japón 2002, donde luego sería eliminada en primera ronda pese a ser una de las favoritas.