VITORIA - El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, apuntó tras la victoria de su equipo ante el Alavés (1-2) que sabían que iban a sufrir y consideró que fueron tres puntos "importantísimos" porque fue con un "campo difícil ante un rival complicado".
El preparador blanco llamó a la calma en rueda de prensa porque "la liga es larga" y celebró que los jugadores creyeron "hasta el final", al tiempo que prometió que pelearán hasta el final como lo hicieron ante el Alavés.
Reconoció que "todos los jugadores están mejor", destacó a Eder Militao y subrayó que "los cambios en el equipo no modifican la dinámica del grupo".
"Tengo 25 jugadores y voy a pensar en todos porque hay muchos partidos. Mi idea es contar con todos y hoy han respondido muy bien", manifestó Zinedine Zidane, que zanjó que nunca han perdido a Isco, que volvió a demostrar que es "un jugador importante con personalidad que lo ha hecho fenomenal".
"Estamos contentos porque ganar estos partidos te da confianza y queremos seguir creciendo como equipo", afirmó el técnico que repasó que "hace un mes decían de todo y ahora tenemos que tener tranquilidad".
"Hoy ha sido un partido diferente a todos los que hemos tenido fuera de casa", dijo Zidane.