En silencio y lejos de los focos, el Paris Saint-Germain ha estado dando pasos importantes entre bastidores para conseguir refuerzos en Europa, y especialmente en esas conocidas 'oportunidades de mercado': jugadores que están al final de su contrato y pueden llegar a la plantilla sin números grandes.
Pero no todo el mundo está de acuerdo con algunas de las opciones del club.
Según información difundida por el diario Le Parisien, el vestuario está dividido sobre las probables llegadas de Sergio Ramos y Gianluigi Donnarumma. Algunos entienden que ambos son "innecesarios".
Según la publicación, la noticia sobre las negociaciones con el exdefensa del Real Madrid dejó insatisfecho a Presnel Kimpembe. El miedo del defensa que se revela dentro del club parisino es perder su espacio en el equipo para que Ramos forme la dupla titular junto a Marquinhos.
Según reveló ESPN, el fichaje del español es un deseo de Mauricio Pochettino, que ve en Sergio Ramos la experiencia necesaria para elevar el nivel de la defensa parisina para la disputa de la UEFA Champions League, el mayor sueño deportivo del club.
Además de la defensa, sorprendió la probable llegada de un portero con la condición de Gianluigi Donnarumma, titular en Italia en la disputa de la Eurocopa. Amado dentro del grupo, Keylor Navas renovó su contrato con el club hasta 2024.
No solo molesta la contratación en puestos donde el elenco 'está bien servido', según una valoración interna revelada por Le Parisien, también los salvajes sueldos que se pagarán a los nuevos nombres del elenco.
La tendencia es que Ramos llegue a Francia con un sueldo aproximado de 15 millones de euros anuales. Se espera que el portero italiano reciba alrededor de 12 millones de euros por temporada.
Al igual que Georginio Wijnaldum, fichado por el PSG tras la finalización de su contrato con el Liverpool , Donnarumma y Sergio Ramos también encajan en el perfil de 'oportunidad de mercado'.
Además de ellos, se espera que el club anuncie en los próximos días la llegada de Achraf Hakimi, que llegará con la condición de ser el dueño de la banda derecha, y costará alrededor de 70 millones de euros en un traspaso desde Inter de Milán .