Manchester City goleó este domingo por 3-0 al Manchester United en Old Trafford, gracias a un doblete de un Erling Haaland intratable y un gol de Phil Foden que lograron plasmar la superioridad de los Citizens en el marcador.
Si bien el encuentro comenzó parejo, con unos Red Devils buscando un juego directo para lastimar con sus rápidos arriba, el encuentro se rompió a los 26', cuando Haaland aprovechó un penal de Højlund sobre Rodri cobrado a instancias del VAR para cambiarlo por gol, venciendo la resistencia de un André Onana que venía de convertirse en héroe por UEFA Champions League al tapar un penal en el último minuto del tiempo de descuento ante el Copenhaguen. Y el United comenzó a entregarse: confundido, corriendo de atrás la pelota y casi sin chances, el juego se tiñó completamente de celeste. Pero el golpe de knockout no llegaría hasta la segunda mitad, cuando nuevamente apareció Haaland para liquidar el encuentro. ¿Liquidarlo? Claro. El City comenzó a ser ampliamente superior, manejando la pelota a piacere, y el noruego culminó una gran combinación entre Jack Grealish y Bernardo Silva, que lo encontraron en solitario por el segundo palo para que solo tuviera que cabecear a la red y terminara de desorientar a los dirigidos por Ten-Hag. Y la diferencia final la terminaría haciendo Foden, empujando un centro de Haaland abajo del arco. Pero el marcador pudo haber sido mayor, porque el United nunca pudo hacer pie en el partido y estuvo en el filo de la cornisa de recibir una goleada mayor. Incluso Onana se lució en varias oportunidades para ponerlo en partido, pero el esfuerzo fue inútil. Con el resultado, el City continúa peleando arriba, a tan solo dos puntos del Tottenham Hotspur. Los Red Devils, en cambio, profundizan su irregularidad, marchando octavos con 15 puntos sobre 30.