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Alisson desplaza a De Gea en lo más alto de la Premier League

En la Premier League, nunca ha habido un arquero tan dominante como David de Gea, de Manchester United.

Sí, hubo arqueros más exitosos: De Gea, quien salió mejor arquero del mundo en el ESPN FC 100, solamente ha ganado un título de Premier League. Sólo tiene un "Guante de Oro" por haber registrado la mayor cantidad de partidos sin permitir goles en una temporada --la pasada, por cierto-- y más de una docena de arqueros lo superan en esta estadística.

Pero estas cifras dependen mucho de la calidad de los compañeros de De Gea. Si evaluamos otro factor, la cantidad de veces que ha sido elegido para integrar el Equipo del Año de la PFA, De Gea está en una liga aparte. Fue elegido cinco veces como el mejor de la liga por sus colegas, incluyendo las cuatro campañas pasadas. Ningún otro arquero ha recibido dicho reconocimiento más de tres veces en la historia de la Premier League.

Pero el reinado de De Gea parece haber terminado. Aún no hemos llegado al punto medio de la temporada, pero es imposible defender el estatus de De Gea tras su alarmante derrape esta campaña. En 2017-18, De Gea no sólo registró la mayor cantidad de partidos sin permitir goles en la división, sino que, estadísticamente, también tuvo el mejor rendimiento. Los datos de Opta sugieren que permitió 14 goles menos de los esperados sobre la base de los remates que enfrentó, por lejos la marca más impresionante de la primera división.

Pero algo ha cambiado. De Gea decepcionó en el Mundial, particularmente cuando el remate de Cristiano Ronaldo se le escurrió por abajo durante el emocionante empate a tres goles entre España y Portugal. Esto disparó un mayor nivel escrutinio sobre su rendimiento internacional, que simplemente no tenía punto de comparación con sus actuaciones en Manchester United.

Ahora son muy parecidas. Y no porque De Gea haya mejorado su rendimiento con la selección nacional, sino porque su rendimiento con Manchester United ha empeorado. Esta campaña sus estadísticas presentan un panorama bastante sombrío, y solamente ha mantenido su arco invicto en dos de 16 partidos.

Lo más alarmante es que De Gea no está atajando con éxito. Un índice de atajadas del 67 por ciento lo deja en la segunda mitad de la tabla de los arqueros, mientras que las estadísticas de Opta ahora indican que solamente ha evitado 0.76 goles esta temporada. Su error contra Arsenal la semana pasada, cuando prácticamente empujó el débil remate de cabeza de Shkodran Mustafi al aire y sobre la línea de meta detrás de él, ha disparado aún más el escrutinio sobre sus actuaciones. De Gea bien podría recuperar su nivel, y no sería razonable descartarlo por un derrape de seis meses tras una década de genialidad. Pero en 2018-19, De Gea no es el mejor arquero de la Premier League.

Este fin de semana se enfrentará a quien probablemente sea el número 1. El martes por la noche, Alisson, el cuarto mejor arquero del mundo según el ESPN FC 100, entregó su momento más memorable con la camiseta de Liverpool; atajó un remate a quemarropa de Arkadiusz Milik, de Napoli, que básicamente clasificó a su equipo a la fase de eliminación de la Champions League. ¿Fue una gran atajada, o Milik pateó justo adonde estaba él? Probablemente no sea ni una ni la otra. El remate no fue particularmente impresionante, pero Alisson había avanzado un par de yardas para cerrar el ángulo, y quizás para apurar a Milik.

De cualquier manera, el simple hecho de que la atajada fuera automáticamente aclamada como brillante dice mucho sobre la reputación de Alisson: Ya es considerado el mejor de la Premier League. Resulta difícil recordar otro equipo de la primera división de Inglaterra que haya dado un salto tan grande en el arco. Simon Mignolet siempre fue un arquero promedio, y Loris Karius simplemente transmitía un aire de inseguridad y nerviosismo que finalmente culminó en su infame error en la final de la Champions League 2018. Por un lado, fue un simple accidente, un error que el alemán no volverá a repetir en su carrera. Por el otro, no sorprendió.

Alisson no fue barato -- £67 millones fue un récord mundial para un arquero, aunque fue superado por la compra de Kepa Arrizabalaga por parte de Chelsea un par de semanas más tarde. Pero fue una inversión que Liverpool verdaderamente necesitaba. Virgil van Dijk había completado la defensa, y Liverpool necesitaba un arquero de primer nivel para consolidarse como candidato al título.

Inicialmente, Alisson impresionó con su distribución. Luego de un debut local tranquilo contra West Ham, durante su primer partido visitante de la Premier League, en Selhurst Park, repartió excelentes pases a los laterales en un triunfo por 2-0, cambiando el juego de una forma que los hinchas de Liverpool no veían desde la salida de Xabi Alonso hace nueve años. Sus rápidas distribuciones dieron lugar a un contraataque de Mohamed Salah, que a su vez terminó en un uno contra uno. El egipcio no pudo aprovechar la oportunidad, pero sí marcó el tono para otros goles de contraataque: el primero de Salah de local contra Fulham, y el remate de Xherdan Shaqiri en Burnley la semana pasada.

El brasileño también se recuperó de un error importante, cuando en un intento de giro contra Leicester perdió la posesión en manos de Kelechi Iheanacho, y Rachid Ghezzal convirtió. Sería inexacto sugerir que Alisson se mantuvo firme con su estrategia de todos modos. El fin de semana siguiente, ante una situación similar de visitante contra los Spurs, mandó la pelota a las gradas ante los vítores sarcásticos de los simpatizantes contrarios. Al igual que su compatriota Ederson en Manchester City, Alisson ya era conocido por correr riesgos, lo cual no suele ser bien visto en el fútbol inglés.

Pero ni siquiera aquellos que prefieren un enfoque más seguro pueden objetar el desempeño de Alisson en el arco. Además de la atajada contra Napoli, detuvo una pelota clave a dos minutos del final de un atrevido triunfo por 1-0 sobre Brighton en agosto y directamente ganó dos puntos, y ganó un mano a mano contra Eden Hazard en Stamford Bridge para mantener a Liverpool en el partido, que luego consiguieron remontar para llevarse un empate. Ese giro de tres puntos podría resultar sumamente importante al final de la temporada.

En total, Alisson logró mantener su arco en cero 10 veces en 16 partidos de Premier League. Su índice de atajadas del 86 por ciento es el mejor de la Liga Premier por un margen muy importante, y ha cedido 6.9 goles menos de lo esperado sobre la base de los puntos de remate. El valor de tener un arquero que se siente cómodo con la posesión suele considerarse como una forma de compensar alguna falla en las habilidades tradicionales del arquero --esto claramente fue un problema para Manchester City cuando Claudio Bravo era su arquero titular y no atajaba casi nada-- pero Alisson es un arquero completo. Su distribución ha dejado de ser el punto destacado de sus habilidades para convertirse en un plus de su juego.

Quizá la única área donde hay espacio para mejorar sea su enfoque en los centros. Tiende a rechazar con los puños, a veces devolviendo la pelota a la zona de peligro, y en un intento de rechazo contra Arsenal le erró a la pelota y terminó golpeando a Henrikh Mkhitaryan, y la pelota se fue apenas larga por el segundo palo. Y debe estar decepcionado con la pelota que dejó pasar en Burnley, donde Jack Cork convirtió luego de que Alisson desviara un débil remate de cabeza de James Tarkowski, pero no son más que pequeñeces.

Puede que Ederson sea capaz de competir con Alisson como el arquero estelar de esta temporada, pero un par de goles innecesarios han dañado su reputación. Además, el hecho de que Alisson sea el arquero titular de Brasil es un factor importante en dicha batalla.

El duelo ente Alisson y De Gea en Anfield este domingo será interesante. El español suele marcar la diferencia en este cruce. Siempre ha salido al rescate de sus compañeros de United, quienes se han beneficiado de errores en el arco contrario. Pero hasta ahora Alisson ha sido el arquero más confiable, y si nos basamos únicamente en las posiciones actuales, se encuentra en vías de igualar el récord de De Gea de un Guante de Oro y un título de Premier League.