Wycombe Wanderers jugará en la segunda categoría del fútbol inglés por primera vez en su historia la próxima temporada después de superar este lunes al Oxford United en la final de play-off de la Liga Uno en Wembley.
Pero la llegada de Wycombe al Championship trae varios registros importantes, uno de ellos es que el entrenador Gareth Ainsworth cuenta con el récord de más años de servicio en las cuatro divisiones principales del fútbol inglés, el mismo que al término del partido afirmó que este logro estaba “más allá de su sueños más salvajes”.
Si quieren saber quién es, les recomiendo la definición de uno de sus defensores Darius Charles: "Cuando tu entrenador llega al club en un Mustang, usa una chaqueta de cuero y escucha rock and roll mientras hace ejercicio en el gimnasio, ¿cómo puede eso no ser contagioso?"
Ainsworth se acerca rápidamente a su octavo año en el trabajo y cultivó un espíritu de equipo invaluable. Pero además integra una banda de rock, The Cold Blooded Hearts, que el año pasado lanzó una versión de The Wanderer (Dion) y cuando Wycombe selló su paso a Wembley, una bandera decía: "Cosa salvaje ... creo que te amo" (“Wild Thing … I Think I Love You, letra de una canción de The Troggs) estaba colocada detrás del banco de suplentes. Un verdadero rock star de botas rojas pero con una reputación de ser uno de los más brillantes fuera de la Premier League.
Un personaje entrañable con una ética de trabajo insaciable, ya sea desinfectando los conos, recogiendo pelotas de los arbustos o arrastrando los aspersores antes de entrenar, guió al club al lugar más importante en sus 133 años de historia y, con su asistente Richard Dobson , crearon una cultura en la que los jugadores (sean noveles o veteranos) mejoran, desde Akinfenwa y Charles hasta Ebere Eze, el mediocampista de QPR que sobresalió cuando era adolescente. Esta temporada, otro que llegó a préstamo de Bournemouth, Nnamdi Ofoborh, y que salió de Millwall a los 16 años, mostró su mejor versión bajo la supervisión de Ainsworth.
Pero hay más personajes en este Wycombe Wanderers de los milagros. Está el jugador más pesado del fútbol mundial: Adebayo Akinfenwa. "A veces el fútbol es una industria muy egoísta, pero creo que la razón por la que Wycombe ha tenido éxito y se está hablando de nosotros es porque nuestro entrenador se concentra muy duro no solo en el campo, sino también fuera del campo y eso es igual de importante. Durante el aislamiento, nos llamó para hablar y preguntar cómo estábamos, y se preocupó por nuestro bienestar. Siempre tratamos de emular lo que es nuestro jefe”, decía el gigante sobre su entrenador.
Nunca llegó a jugar en la Premier League ni tampoco en la Championship hasta este lunes y sin embargo es de los jugadores más poulares del planeta. Camino a los 38 años pasó por 14 equipos diferentes, haciendo goles en todos ellos, es inglés y lo conocen como The Beast.
Tiene más de 200 mil seguidores en twitter, su figura no es la de un atleta del fútbol pero se lo toma con humor. “No sigo ninguna dieta especial”, reconoció durante una entrevista en la que se le preguntaba por su peso, habiendo convertido las burlas de sus inicios en elogios cuando se acerca al final de su carrera.
Nació en Londres, es hincha del Liverpool y arrancó su carrea a los 19 años en Lituania. Hoy es dueño de una marca de ropa, Beast Mode On, cuyo nombre hace referencia a su físico y se dio el gusto de rechazar un par de ofertas de la MLS cuando jugaba en el Wimbledon inglés desde donde emigró en 2016 a su actual club para cumplir el ascenso a la segunda división del fútbol inglés.
Por último el lateral Joe Jacobson, que este lunes convirtió el penal que le dio el ascenso al equipo, este año tenía el récord de marcar tres golazos en el mismo partido cuando le ganaron 3-1 al Lincoln City.