El mundo del deporte inglés se unirá desde este viernes, y hasta la medianoche del próximo lunes 3 de mayo, en un boicot conjunto a las redes sociales con el objetivo de denunciar simbólicamente el abuso, los mensajes de odio o el racismo continuado al que se exponen los deportistas en sus perfiles.
A esta campaña (que se extenderá principalmente a Facebook, Instagram y Twitter), alentada por la organización "Kick it out" contra el racismo en el fútbol inglés, se unió recientemente la Unión y la liga de rugby, el cricket, el tenis y el ciclismo; e incluso organismos corporativos, tales como la FIFA, la UEFA, o el banco Barclays, entre otros.
En esta misma línea, el Chelsea hizo hincapié en los mensajes antisemitas, ante los que abrió una investigación que acabó con la expulsión de un individuo del equipo para diez años. "Nuestros jugadores, personal, fanáticos y visitantes del club provienen de una amplia gama de orígenes, incluida la judía, y queremos asegurarnos de que todos se sientan seguros, valorados, e incluidos", añadió.
También se han pronunciado figuras destacadas del panorama deportivo británico, como el heptacampeón de Fórmula 1, Lewis Hamilton, de origen afrobritánico, que comunicó que aunque este boicot no "resuelva el problema en una noche", desaparecerá de sus redes este fin de semana en solidaridad con la comunidad futbolística británica.
"El deporte tiene el poder de unirnos. Rechacemos el abuso como parte del deporte, y seamos los que marquemos la diferencia para las futuras generaciones", añadió el piloto en su cuenta de Instagram.
La Fórmula 1 no se involucrará oficialmente al boicot como organización, aunque el organismo emitió un comunicado en redes sociales en el que ratificó su compromiso frente a la discriminación "en línea o de otro tipo".
El presidente de la organización "Kick it out", Sanjay Bhandari, confesó que el boicot significa la "ira colectiva" del fútbol inglés frente al odio en redes sociales. y el extremo del Crystal Palace, Andros Townsend, añadió que este boicot lanzará una "advertencia" a las plataformas para cambiar, o de lo contrario el apagón será "definitivo".
Algunos jugadores como el exdelantero francés del Arsenal, Thierry Henry, ya decidieron retirarse de las redes sociales a causa de los mensajes racistas y la intimidación recibidas en sus perfiles.
De hecho, una encuesta de BBC Sport destapó que un tercio de los participantes, deportistas británicos de élite, habían sufrido abusos en sus redes sociales.
Por este motivo, el deporte inglés confía con este boicot de 4 días en dar un toque de atención a los ejecutivos de las redes sociales -a quienes ya enviaron una carta el pasado mes de febrero- e instarles a mejorar sus acciones para erradicar el odio en sus plataformas.
Entre las acciones solicitadas están el "bloqueo y eliminación rápida de publicaciones ofensivas", así como un "proceso de verificación mejorado", "prevención de reinscripciones" o el control de los perfiles que originan los mensajes de odio.
Por su parte, Instagram anunció recientemente que incluirá una herramienta que permita a los usuarios "filtrar los mensajes abusivos" de perfiles desconocidos; y Twitter admitió en un comunicado que garantizará que las conversaciones sean "seguras" y que, tan solo en Reino Unido, y desde el comienzo de la temporada en septiembre, eliminó de forma "proactiva" más de 5.000 tweets sobre fútbol que violaban sus normas.