Jesús Corona, con el ejemplo de su abuelo y tíos, comenzó a tomarle el gusto al futbol en los partidos llaneros a los que acompañaba a su papá.
Jesús Corona siguió una tradición familiar bajo los tres postes que comenzó a escribirse en la década de los 40 y sigue viva. El actual portero de Tijuana es el cuarto cancerbero que tiene el árbol genealógico de los Corona Rodríguez. Todo empezó con Gilberto Rodríguez, su abuelo, siguió con Gilberto ‘Coco’ Rodríguez y Estéfano Rodríguez, sus tíos. Actualmente la estafeta está en ‘Chuy’, pero en el círculo cercano confían en José Miguel, quien, procedente de Cruz Azul, acaba de firmar con la Sub-14 de Xolos.
El padre de Jesús Corona, quien lleva el mismo nombre, considera que su hijo trae el futbol en las venas desde la infancia por herencia familiar. De lado de la abuela materna, hubo tres porteros. Gilberto Rodríguez, quien jugó en Atlas; Gilberto ‘Coco’ Rodríguez, quien estuvo en Chivas en la época de Ignacio Calderón en los 60 y 70; además de Estéfano Rodríguez, portero del Guadalajara en tiempo de Javier ‘Zully’ Ledesma.
“Su abuelo materno era futbolista profesional, llegó hasta Segunda División, él jugaba de portero, Gilberto Rodríguez, papá de Gilberto Rodríguez, el ‘Coco’. Mi suegro era portero, él jugó en Atlas y en otro equipo, jugaba bien el señor, fue en el 40 y tantos. Luego sigue Gilberto el ‘Coco’, portero de Chivas. El ‘Coco’ jugó en el Guadalajara 21 años. Luego salió Estéfano Rodríguez, también jugaba futbol”, recuerda el señor Corona.
Jesús Corona, con el ejemplo de su abuelo y tíos, comenzó a tomarle el gusto al futbol en los partidos llaneros a los que acompañaba a su papá, quien jugaba como lateral derecho, pero, ante sus compromisos laborales, no pudo llegar a nivel profesional.
“Me gustaba mucho el futbol, solo que yo no tuve la oportunidad de jugar porque me dedicaba a trabajar. Me acompañaba a partidos llaneros, iba a verme, tenía como tres años y le empezó a nacer su amor por el futbol. Yo jugaba de lateral, porque yo era malo, malo, pero me gustaba mucho el futbol, me empezó a gustar de corazón el futbol”.
El pasado 7 de marzo, Jesús Corona anunció su deseo de colgar los guantes con Cruz Azul, equipo del que salió para firmar con Tijuana, pero en esa conferencia de prensa, también reveló que en un año pensará en el retiro.
“Mi ilusión es mantenerme en el club, obviamente me gustaría retirarme aquí en la institución, en esta institución que me ha respaldado en todo momento, por lo que estoy muy agradecido, pero ya sería cosa de analizar. A mí me gustaría jugar un año más y ya pensar en el retiro”.
Atrás de Jesús Corona, aparece el nombre de su hijo José Miguel, quien fue bicampeón con Cruz Azul en la categoría Sub-12, pero con el traspaso de ‘Chuy’ a Tijuana, el infante pasó a las filas de la Sub-14 de Xolos, quien tiene las esperanzas de su abuelo en que pueda mantener viva la tradición familiar en la portería, ante el retiro de Misael, su otro nieto.
“Ahí viene su hijo José Miguel. Ese muchachito también tiene el futbol adentro, dentro del corazón, le encanta el futbol. A ese niño le encanta el futbol y va siguiendo los pasos de su papá porque ya ha sido varias veces campeón con Cruz Azul y va siguiendo los pasos de él y va a llegar muy alto también”.
“Misael ya se retiró, a mí me pesó mucho que se haya retirado, pero son cosas que él decidió. Estoy muy contento con José Miguel, que él va a seguir los mismos pasos de ‘Chuy’. Ojalá, Dios quiera, siga adelante. Le aconsejo que siga adelante, echarle muchas ganas”. En Cruz Azul ven normal el hecho de que Jesús Corona se haya llevado a su hijo José Miguel a Tijuana, pero esperan que en un futuro pueda regresar a las filas de la Máquina, pues lo veían como uno de los principales prospectos que tenían en sus fuerzas básicas, donde dejó dos campeonatos en la Sub-12.