Julián Quiñones abandonó en camilla el Estadio Olímpico de la BUAP debido a una lesión que sufrió solo en una desafortunada jugada.
Al delantero colombiano se le trabó el pie en el césped y derivado de esto sacó una lesión en la rodilla derecha, donde se le colocó hielo para aminorar el dolor y la hinchazón.
Luego de lastimarse, el jugador de 22 años fue atendido en el campo por las asistencias médicas y después de dejar el terreno de juego, derramó lágrimas en la banca de visitante.
Quiñones fue relevado al minuto 35 por Eduardo Vargas en el encuentro de la Jornada 14 en que Tigres visita a Lobos BUAP.