Luego de perder su invicto ante León, los universitarios se plantearon enfrentarlos de nuevo en la final
El 21 de septiembre Pumas perdió un invicto de 10 juegos ante León. Los Esmeraldas sepultaron las ilusiones auriazules de llegar a 11 juegos sin conocer la derrota e igualar una marca histórica que tuvieron hace casi una década. Sin embargo, el 2-0 en contra los dejó en el camino de repetir dicha historia.
Aquella noche, en el vestidor del Estadio Nou Camp, los elementos del cuadro del Pedregal se prometieron una cosa: enfrentar a León hasta la final del torneo Guard1anes 2020. Este jueves, la premonición se cumplirá.
Érik Lira, mediocampista de Pumas, compartió la anécdota con ESPN Digital y reveló que después del juego de vuelta de las semifinales ante Cruz Azul, están ansiosos por medirse a este nuevo reto, uno que todavía no se cree a sus 20 años y en su torneo de debut.
"Nosotros el día que jugamos contra León, al término del juego, dijimos que íbamos a trabajar porque los íbamos a ver en la final. Nico Freire fue el que lo dijo y todos nos emocionamos. Te juro que fue increíble y el hambre de revancha es fuerte. Llegamos súper motivados después del domingo y con muchas ganas que ya sea mañana”, reveló a este portal.
Lira se unió a una lista de ‘videntes’ del cuadro felino, y es que junto con Nicolás Freire y Alan Mozo, fueron tres las premoniciones de los universitarios en el actual torneo.
La primera fue en el duelo de la fecha 10 ante Atlético San Luis. Antes del inicio del partido, Alan Mozo sostuvo, en su llegada al estadio, que el marcador sería de 3-0 a favor de los suyos. Dicho y hecho, el encuentro finalizó como lo predijo el lateral derecho gracias a goles de Juan Pablo Vigón y Juan Dinenno, así como un autogol de los potosinos.
Después, en la fecha 11, Freire prometió que a León lo verían en la final, tal como contó Lira. Finalmente, el juvenil de 20 años predijo, un día después de la derrota en el juego de ida ante Cruz Azul en la semifinal, que remontarían en casa.
"Remontadas han habido muchas en el futbol. En 2015 iban perdiendo 3-0 y al final estuvo a nada. Si ellos nos metieron tres goles en 10 minutos, por qué no hacerlo nosotros. Si ellos nos meten cuatro en su casa, podemos hacerles cinco en la nuestra, estamos convencidos de que se puede hacer”, dijo Érik Lira en conferencia de prensa.
Por otra parte, el contención de 20 años recordó a este portal que vive un sueño después que hace un año regresó a jugar futbol después de una lesión de ligamento cruzado de lo dejó fuera de las canchas por siete meses.
"La verdad es que hace un año venía regresando de una lesión de ligamento cruzado. Por estas fechas fue mi primer partido después de la lesión tras siete meses fuera. Ahora, un año después estoy a horas de disputar una final, en mi primer torneo en Primera División. Es algo que no me lo creo todavía”.
Finalmente, Lira compartió cómo vivió la semana en la que aseguró que podían darle la vuelta al Cruz Azul y la motivación que ahora tienen para medirse a León, con quien pronosticaron verse de nuevo en la final.
“Nervioso sí estaba. Estaba triste, decepcionado. Toda la noche no dormí bien pensando en el partido. El viernes llegamos y había buena vibra. Sabíamos que ya había pasado. Cada palabra que dice él (Talavera) y todos trato de escuchar. Eso me va a ayudar para cuando sea grande y le diga a otros chavos. Yo dije que claro que se puede. En nuestra casa nadie nos ganó y se puede. Me llegaron mensajes que era imposible, pero mira dónde estamos”, finalizó.