Técnicos, jugadores y dirigentes comparten la culpa de la eliminación de la Selección Colombia al Mundial 2022. El rendimiento futbolístico fue muy bajo, la elección del primer técnico se alejó del estilo de siempre y no hubo respuestas cuando la tabla apretó.
El balance negativo de esta Eliminatoria reparte responsabilidades para todos. La lista es larga.
La apuesta de riesgo por Carlos Queiroz: En febrero de 2019 la Federación Colombiana de Fútbol lo presentó como el nuevo entrenador. Implantó el 4-3-3 incomprendido por el plantel, pese a su buen arranque con la victoria 2-0 ante Argentina en la Copa América de Brasil.
Comenzó invicto en la primera doble fecha de la Eliminatoria. Un mes después perdió el control del equipo con dos goleadas inéditas en el torneo. Improvisó sobre la marcha, su mensaje confundió y cerró su ciclo séptimo con diferencia de gol negativa.
El 4-4-2 de Reinaldo Rueda sin respuestas: El DT atendió la emergencia para la quinta fecha de Eliminatoria. Tuvo además un mes de preparación con otra Copa América en la que afianzó la defensa, sin embargo, no pudo fortalecer el ataque, ni la generación de fútbol.
Hizo combinaciones con todas las duplas posibles entre Luis Muriel, Rafa Borré, Duván Zapata, Falcao, Miguel Borja, Luis Suárez y Roger Martínez. La Selección estuvo siete partidos consecutivos sin gol.
El gol peruano de Edison Flores en Barranquilla: La tabla fue generosa hasta la fecha 15 del pasado 28 de enero. Hasta entonces, Colombia disimuló su cosecha de nueve puntos en ocho partidos con los resultados de otros rivales.
Con todo para asegurar cupo directo y cuarta en zona de clasificación, recibió a los peruanos en el Metropolitano. A cinco minutos del final, desprotegida en defensa, permitió una contra que terminó en gol para la victoria de Perú.
Ese triunfo lo puso un punto por encima de la tricolor, diferencia que aunque corta, resultó imposible de remontar en el resto de la Eliminatoria.
Faltó carácter en los referentes: El capitán Falcao García estuvo ausente en ocho de los 18 partidos de la Eliminatoria. Las lesiones lo alejaron de un vestuario que extrañó su ascendencia. Al equipo le faltó más personalidad para resolver situaciones adversas.
Juan Guillermo Cuadrado lo intentó, pero su nivel en la cancha se apagó. Rueda tampoco ayudó. Su semblante abatido simbolizó lo que fue el equipo ante Argentina después de la derrota contra Perú.
Colombia se defendió en extremo en Córdoba frente a un rival sin Lionel Messi. Falcao lo describió tras caer 1-0: "El entrenador quería que mantuviéramos el cero y que con el pasar de los minutos nos tomáramos más confianza, que los dejáramos salir para encontrar en el contragolpe los espacios para lastimar a Argentina. Al principio nos costó bastante, pero Colombia se fue acercando al arco rival, desafortunadamente ellos hacen el gol y el partido fue más difícil para nosotros".
Mal local en Barranquilla: El Metropolitano fue accesible para las demás selecciones. De nueve partidos, Colombia ganó tres: a Venezuela, Chile y Bolivia; empató cuatro con Argentina, Brasil, Ecuador y Paraguay y perdió dos frente a Uruguay y Perú.
Su rendimiento en casa fue del 48 por ciento. Muy pobre. Tampoco lo compensó como visitante. Las únicas victorias fueron ante Perú en Lima y Venezuela en Puerto Ordaz.