MÉXICO -- Gerardo Martino es el autor de una revolución silenciosa en el Tricolor, el propio entrenador argentino la niega, pero en la práctica lo hace. El actual técnico de la Selección Mexicana esculpe el futuro del Tri en la Liga de Naciones de la Concacaf, con un plantel que tiene a 11 jugadores que han probado por primera vez la experiencia de llegar al representativo nacional bajo su mando y con sólo cuatro de los 23 futbolistas que asistieron por México al Mundial de Rusia 2018.
Martino trabaja a su ritmo y a veces pasan casi desapercibidos los nombres de Guillermo Ochoa, Javier Hernández, Marco Fabián de la Mora, Miguel Layún, a los que cambió por los de José Hernández, José Juan Macías, Cristian Calderón, Alan Mozo y Francisco Córdova, de una fecha FIFA a otra.
“Los motivos son Macías, Calderón, Arteaga, Mozo y los volantes que están que pueden jugar por Marco Fabián, como Córdova o Aguirre. De mi boca nunca va a salir algo, las respuestas siempre van a estar por el lado futbolístico”, confirmó el Tata al ser cuestionado sobre la ausencia de jugadores con mayor renombre.
De los 23 que fueron al Mundial de Rusia 2018, sólo cuatro participarán en la Liga de Naciones de la Concacaf: Carlos Salcedo, Héctor Herrera, Hirving Lozano y el Jesús Tecatito Corona. Bajó el promedio de edad tres años, al pasar de una media de 26.2 a una de 23.1 años.
Los elementos que ha elegido el técnico argentino para esta nueva etapa de la Selección Mexicana incluye a jugadores entre los 20 y 24 años. La lista podría aumentar, ya que desde hace un mes trabaja con un grupo de jóvenes que se planea lleguen a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y “esperamos que en un futuro a corto plazo compitan por un lugar en la selección mayor”, confiesa Martino en la conferencia previa al juego contra Bermudas.
Según Charly Rexach, Martino no es un técnico tirano, no es un técnico de mármol, no es un técnico tigre; es un tipo normal, que sabe tomar decisiones. En silencio, el Tata revoluciona al Tricolor.