La figura de Quique Wolff junto a una pelota, en un studio de televisión y con un invitado enfrente, no deja margen para las dudas: no se va a hablar de otra cosa sino de fútbol. Acaso porque el fútbol ha sido simplemente su vida. Como jugador y como periodista. Desde hace 28 años, superando la barrera de los mil episodios en ESPN, Quique Wolff le ha puesto la misma sabiduría y pasión a su programa “Simplemente Fútbol”, que cuando salía a la cancha para disputar un partido.
Como jugador, tuvo que enfrentarse a grandes como Pelé y Johan Cruyff. Fue compañero de Diego Maradona cuando éste empezaba a despertar como la estrella que finalmente fue. Como periodista, los tuvo a todos en su programa “Lo bueno del programa era que alos invitados eran homenajeados. Porque si te invito a cenar a casa, no te te voy a hacer lavar los platos” dijo Quique en la charla virtual que mantuvo con Fernando Palomo en el podcast ‘Nos Ponemos las Pilas’. “Lo meta era que quien estuviera del otro lado se sintiera cómo y disfrutara. No queríamos polémicas ni peleas. Y para mi que Don Alfredo Distéfano, Pelé, Maradona, Cruyff, Ronaldo hayan venido, no tiene precio”.
¿Por qué la pelota estuvo presente en cada entrevista? La razón es simple. “El principio era que si no la tenía no podíamos hablar de fútbol. Si no está la pelota no se juega. Pueden faltar jugadores, el público, el árbitro… pero sin la pelota no se juega”.
Tras 28 años de entrevistas con quienes escribieron la historia del futbol, numerosas anécdotas atesora en su memoria. “Lo fuimos a entrevistar a New York y nos daban 3 minutos para hablar con él. Me presenté mostrándole una foto que me había sacado con él en un partido entre Racing y Santos. Me dijo que se acordaba, aunque no creo que lo hiciera. Cuando empezamos la nota le pregunté por su padre que había jugado en Baurú y se largo a hablar. A los tres minutos nos quisieron cortar pero él les dijo que seguiría hablando conmigo. La entrevista duró unos 15 minutos”. De New York viajó a España. Lo esperaban Johan Cruyff para una entrevista y una noticia inesperada; la muerte de su excompañero Juanito. “Viajé hasta Madrid y de allí fui a Barcelona, hablé con Cruyff y la nota fue maravillosa, pero cuando regresé a Madrid, no pude llegar a tiempo a despedir a Juanito. Tenía las dos notas más importantes para el programa, pero yo estaba llorando solo en el aeropuerto. De eso no me olvido jamás de ese día”.
La conversación fluye pero también cambia de ángulo. ¿Era mejor el fútbol de antes o de ahora? Quique Wolff no evade la respuesta planteando dudas. “Siempre pregunto si era más fácil jugar en la canchas de antes o en las de ahora? ¿Con la ropa de antes o la de ahora? ¿con la pelota de antes o la de ahora?. Por eso siempre digo que hay epocas y si tengo que elegir a los mejores, los elijo en cada una de ellas. Primero Alfredo Distefano, a quien no vi jugar, pero todo el mundo habla maravillas y yo les creo. Luego vino a Pelé, más tarde Johan Cruyff y después Maradona. Terminada la época de Diego hay varios: Ronaldo puede estar, Zidane también. Y ahora es Messi. Porque Cristiano es un goleador tremendo, pero el mejor es Messi”.
Las anécdotas continúan apareciendo. “Un día Maradona había llegado a Madrid y yo estaba haciendo entrevistas en el entrenamiento del Real. Entonces me encuentro con Roberto Carlos y Ronaldo y me dicen: “Quique, sabemos que Diego está en Madrid y queremos conocerlo, queremos cenar con él”. Días después hice una nota con Diego, le comenté que querían cenar con él y la organizamos. Se sumaron el Mono Burgos, Santiago Solari y varios más para hacer una mesa gigantezca. ¡No sabes como lo miraban a Maradona!. Ahí en donde te das cuenta de la grandeza de esos jugadores”.
Con Messi también tiene su historia. “Estaba en Barcelona y quisimos hacer una nota con él. Lo llamamos y le dijimos que como su casa no estaba muy lejos de nuestro hotel, lo iríamos a visitar para entrevistarlo. Él nos respondió que de ninguna manera aceptaría, sino que él vendría al hotel. Cuando terminamos de hacer la nota, me cuenta que lo habían puesto de suplente ante el Real Madrid. “Jugaban Ronaldo y Roberto Carlos”, me dijo asombrado. Increíble. Y otra vez que fuimos a relatar un partido del Barcelona, el día antes me dijo que me dedicaría el segundo gol que hiciera. Y cumplió”.
Muchísimas figuras pasaron por su programa. Un programa en el que no solo se habla, sino que simplemente se respira fútbol. Por él han pasado futbolistas, músicos, personajes futboleros y las estrellas más importantes a nivel mundial. Sin embargo, tras 28 años, Quique Wolf reconoce tener una lista de pendientes. “Cristiano Ronaldo es uno de los que me faltan, pero no se ha dado hasta el momento. Ojalá que algún día lo pueda tener”. Lo que si podemos asegurar es que algún día, en la lista de pendientes no va a estar el portugués.