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Martín García sobre el fallecimiento de Robert Lima: "No lo podemos creer. Es un momento de mucha tristeza"

Robert Lima falleció sorpresivamente a los 48 años @OficialCAP

El ‘Tato’ Martín García se expresó este jueves por la noche a pocas horas de confirmarse el fallecimiento del ‘Bola’ Robert Lima, ex futbolista de Peñarol. García recordó en Sport 890 a su amigo fallecido sorpresivamente a los 48 años.

“Es un momento de mucha tristeza. Uno nunca se espera que pueda recibir una noticia de esta índole, primero querés que no sea verdad, hasta que lamentablemente te enteras que es verdad”, comentó el Tato.

El actual entrenador remarcó: “No lo podemos creer, se nos vienen a la cabeza un montón de recuerdos de un tipo que como compañero fue sensacional, que siempre dejó todo por Peñarol y que esto tenga un final de esta manera… la verdad que estamos destrozados todos”.

“Hay mucha gente que no lo conoció y tenía esa imagen de lo que era el Bola Lima como futbolista, sobre todo capaz un hincha de Nacional al vivir tantos clásicos, de un tipo recio que daba la vida en cada pelota; pero por otro lado puedo decir también que gente que realmente lo conoció como persona supo que fuera de la cancha fue un tipo sensacional, tímido”, manifestó.

García añadió: “Siempre uno dentro de la cancha defiende los colores y cada pelota, sobre todo él que era un central o un lateral izquierdo que se jugaba la vida en cada jugada, pero el que realmente conoció en el día a día a Robert Lima (como le decía el Canario Gregorio Pérez que le decía Robert y no ‘Bola’) supo que fue un tipo muy divertido, muy humilde, callado, con una voz muy bajita, y ese es el Bola que yo recuerdo, el gran compañero, el de mil batallas dentro de la cancha, con muchas vivencias fuera del campo de juego, y con una familia divina”.

Asegurando tener miles de anécdotas, el Tato eligió contar una ‘un poco tragicómica’ ocurrida en una práctica de fútbol en Los Aromos entre titulares y suplentes. Lima era el lateral izquierdo en los titulares y Nacho Borjas el lateral derecho del equipo B. En determinado momento, hubo un cambio de frente y ambos laterales rompieron línea en busca del balón. Gregorio Pérez, ‘que siempre nos cuidaba como si fuera un padre, y conociendo también cómo disputaba cada pelota el Bola’, gritó: “¡Cuidado, Robert!” Pero eso no fue suficiente para evitar el choque que hizo que Borjas estuviera ‘como una semana sin poder moverse’.

“Ese era el Bola, lo que lo pintaba como futbolista, dejando todo en cada pelota dividida; pero también estaba el Bola de afuera de la cancha, gracioso y callado, ese es el Bola que me voy a llevar. Estoy muy triste”, remarcó García.

Y sentenció: “El cariño y el dolor están, y lo recuerdo así, como un gran tipo, un fenómeno fuera de la cancha, un gran compañero que siempre defendió los colores de Peñarol”.