La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) publicó este miércoles por la noche los audios del VAR de algunas de las jugadas más polémicas de la novena fecha del Torneo Clausura, destacándose la jugada donde Diego Polenta, zaguero de Nacional, cortó con la mano el ataque de Agustín Canobbio, volante de Peñarol, en el clásico del domingo pasado.
El encuentro entre carboneros y tricolores en el estadio Campeón del Siglo terminó 0 a 0, y una de las jugadas que más protestaron los jugadores locales fue la mano de Polenta, exigiendo su expulsión al detener ilícitamente el avance de Canobbio al minuto 56. El árbitro del partido Andrés Matonte entendió que la jugada sólo ameritaba la tarjeta amarilla, decisión ratificada por el VAR, en cuya cabina estaban Esteban Ostojich y Mathías De Armas.
“¡Mano! ¡Mano!”, se escucha decir a Matonte en el inicio del archivo revelado por la AUF. Inmediatamente después, De Armas advierte que los futbolistas de Peñarol ‘están protestando DOGSO’.
¿Qué es la zona DOGSO? DOGSO, por sus siglas en inglés, significa Denying an Obvious Goal Scoring Opportunity, que traducido al español sería ‘Negar una evidente oportunidad de gol’. Esta zona, lo que sería la ‘oportunidad manifiesta de gol’ (que hace años dejó atrás el concepto de ‘último hombre’ o ‘último recurso’), ocupa prácticamente todo el centro del campo rival, dejando de lado las bandas, y será DOGSO siempre y cuando el atacante tenga control del balón, y también dependerá de la cantidad de defensas rivales.
“Dejá correr la jugada y detené para cuando la para con la mano”, le indicó Ostojich al técnico de video. Al mismo tiempo, Matonte en cancha recibía las protestas de Canobbio y el árbitro le respondía que había dos jugadores de Nacional que iban cerrando desde cada uno de los laterales (Diego Rodríguez por izquierda y Armando Méndez por derecha).
“Por más que hubiese o no otros jugadores de Nacional detrás de Polenta, yo había visto un hueco por el medio y venía lanzado en velocidad, no sé si a ellos les daba para cerrar. Yo creo que me iba sólo porque también uno siempre siente eso, capaz que de otra perspectiva no era tan así y además estaba lejos del arco rival”, comentó este martes Canobbio en Radio Sport.
Regresando a los audios del VAR, Ostojich revisó las imágenes de la jugadas y concluyó: “La distancia y el número de jugadores, la distancia y este jugador (señalando a Diego Rodríguez que iba a intentar cerrar desde el lateral izquierdo) no me da para DOGSO. Es una conjunción de todo, control de balón tiene, pero falta distancia a la meta y número de jugadores, este defensa puede llegar”.
De Armas dijo compartir esta observación y, mientras Gargano le marcaba a Matonte que el lateral tricolor Christian Almeida estaba en ataque y que no quedaba ningún defensa tricolor, Ostojich comunicó su decisión, confirmando que era tarjeta amarilla y no roja para Polenta: “El chequeo está completo, el número 15 es el que va cerrando”, afirmó.
Así, Matonte mantuvo la decisión inicial y el zaguero tricolor continuó en cancha.
Pese a la concordancia que tuvieron tres árbitros, en filas aurinegras señalan que la jugada igualmente podría discutirse como tantas acciones en el fútbol sumergidas en la incertidumbre y la subjetividad del propio juego, y yendo a un análisis más exhaustivo se podría preguntar si los árbitros debieran también tener en consideración la diferencia de velocidad entre Canobbio y Diego Rodríguez, lo que llevaría a agregar más y más aspectos a la discusión sobre una sóla jugada, ratificando que el fútbol es el juego infinito, como ha afirmado tantas veces el ex futbolista argentino Jorge Valdano.