SANTIAGO DEL ESTERO (Enviado especial) -- Materializar un sueño muy grande debe ser uno de los deseos que cualquier deportista tiene cuando inicia la actividad desde muy chiquito con tanta pasión. Este martes 10 de diciembre no será un día más para varios Leones y Leonas que comienzan a dar sus primeros pasos con la camiseta argentina. El escenario será la Pro League de Santiago del Estero y los rivales, Alemania e Inglaterra, respectivamente.
Tal vez le temblaban las piernas a Matías Rey cuando el 22 de julio de 2006 pisaba la cancha por primera vez con la casaca albiceleste en el Champions Trophy de Terrassa ante Países Bajos. Diez años después conseguiría la medalla dorada olímpica, en un acto sin precedentes. Tal vez le ganaban las lágrimas a Majo Granatto cuando un 26 de enero de 2013 su vida iba a cambiar para siempre tras debutar con Las Leonas en un Sudamericano contra Perú. 11 años después la encuentran en Argentina como referente de un plantel renovado y con una presea de plata olímpica y otra de bronce más un subcampeonato del mundo en su lista exitosa de alegrías.
Lo cierto es que 15 nuevos nombres (10 Leonas y 5 Leones) se suman a la rica historia argentina de este siglo con esa misma vibra intacta que sintieron Rey y Granatto y aún los llenan en cada entrenamiento, cada concentración, cada anécdota, cada abrazo de gol, cada trago amargo en la derrota y cada grito para volver a levantarse. Como le dijo Agos Alonso a ESPN Hockey: “Ser una Leona es un estilo de vida”. Hecho que también cabe para los varones. Así lo reflejaron en estos primeros días los dos grupos que tienen el honor de representar a Argentina en casa.
Solo la familia Artola, Ambrosini, Férola, Knobl, Falasco, Alimenti, Bruggesser, Larsen, Pisthon, Santamarina, Domene, Andreotti, Ruiz, Correa y Bonanno saben todo lo que ellos esperaron este día. El nerviosismo, la incredulidad en la noche previa de entrenamiento estuvo. Pero, tampoco faltaron las risas, la complicidad, la música, las fotos y los abrazos. Porque si de algo se trata el hockey y más con el amateurismo que sigue teniendo, es de la alegría de compartir una pasión y hacerlo con quien siente lo mismo que vos. Porque como dice la canción de Bersuit Vergarabat: “La vida pierde la gracia para el que olvida celebrar”.
De Ushuaia hasta La Quiaca, de la Cordillera hasta el Río de La Plata, más de una chica se despertó un día y dijo: “Quiero ser Leona”. Más de uno quiso jugar al lado de los Mati Rey o soñó con hacer el gol del oro del Pájaro Mazzilli o el de bronce de Sofi Cairó y abrazarse con sus amigos por llegar a la gloria eterna. Santiago del Estero será el lugar. El hockey lo pondrán ellos. Bienvenidas. Bienvenidos.