Transcurrida la primera parte, ameritaba una introspección en el legado que Agos Alonso intenta dejar en su recorrido, lo sucedido este año con su querido Club Banco Nación y hasta donde piensa que le podrá dar todo de sí al seleccionado argentino, para también brindarse el tiempo de armar la vida que -fuera del deporte- desea construir.
Agostina tiene una virtud que la hace inigualable entre sus pares y lo disfruta como ninguna otra cosa en el campo. Alonso escapa, de los problemas que le generan, de los quites que le tiran y las situaciones que la acomplejan, pero esta vez decidió dejar de apartarse y tomar el guante para enunciar lo que representa en ella el legado que hoy la tiene como una de las encargadas de propagarlo:
"Primero soy Leona… y después soy"
"Así en todo. En la calle primero soy Leona, estoy representando a un equipo con valores infinitos, con un legado impresionante, entonces tengo que ser súper respetuosa y súper amable. Somos vidrieras, tenemos que ser súper responsables de cómo nos mostramos, creo que eso fue lo que más me costó aprender, pero ese es el mensaje o lo que yo quiero reflejar cuando estoy jugando vestida de Banco Nación, primero soy Leona y tengo que comportarme como tal porque Las Leonas son lo más y yo quiero que la gente cuando vea a cualquiera de nosotras, no a Agos Alonso, a cualquiera, siga pensando que somos lo más y mantener la imagen de las Leonas allá arriba".
Alonso en un baluarte de Las Leonas, hace años mantiene un nivel formidable en el campo, y una conducta fuera que la ha llevado a ser insignia en cada equipo que integró, pero… ¿cuándo se dio cuenta que podía llegar a ocupar el lugar que tiene hoy?: “No sé si era un sueño llegar, porque no sé si me imaginaba jugando acá, para mí eran tan buenas, que yo no sé si me daba para estar. Cuando me llamaron del Junior fue una sorpresa muy grande, lo empecé a ver cómo, ‘che, no estoy tan lejos’. Obviamente siempre fui de esforzarme, en el club quería ser la primera en físico, jugar todo el partido, los sábados me encantaba estar, si era de sexta quedarme en quinta; sabía que con el esfuerzo venían cosas buenas y fue como un lema dentro del deporte, pero en el Junior empecé a verlo como: ‘si me dedico realmente ¿puedo llegar? ¿Puedo seguir este estilo de vida? ¿Y cómo hago para hacerlo?’ Y creo que ahí fue la primera vez que me lo empecé a plantear. Quizás Las Leonas necesitan un "5", que sea prolijo, pase la pelota... y arranqué a dedicarme un poco a eso”, conjeturó la cinco.
"La prioridad siempre está en Las Leonas"
Agos es una de las campeonas del mundo Sub-21 en Santiago de Chile, que cuando pasaron al seleccionado mayor en el 2017 se toparon con leyendas (de la talla de Carla Rebecchi, Rosario Luchetti, Silvina D’Elia, Belén Succi… por nombrar algunas) que les marcaron el camino a esas jóvenes jugadoras que terminaron el Junior en 2016 y hoy en día ejercen el rol de guiar a las futuras generaciones: “Tuve mucha suerte de encontrarme a los 20 años, cuando arranqué en Las Leonas, con referentes de la hostia a las que me gustaría parecerme un poco más. Trato de hacerlo, son las que me inculcaron que la prioridad la tiene el seleccionado, que vos podés querer mucho a tu club, tener o querer hacer una carrera universitaria, pero la prioridad siempre está en Las Leonas. Podés tener una vida más allá de esto, pero Las Leonas es un estilo de vida. Lo otro hacelo porque está buenísimo como herramienta, pero siempre en función de ser mejor acá. Creo que es un doble mensaje, no hay que no estudiar, ni no ir a los clubes, no estoy diciendo eso, pero vos empezás a ver las cosas desde otro lugar”, alegó la voz analitica del seleccionado femenino.
En diciembre de 2023 Las Leoncitas salieron subcampeonas del mundo y hubo varias que luego de ese momento irrumpieron en el seleccionado mayor, otras ya tenían algunos roces pero tras el Mundial Junior pasaron a ocupar un rol con el primer equipo que las condujo a destacarse en París: “Justo estas cuatro chicas (Juana Castellaro, Zoe Díaz, Lara Casas y Sofía Cairó) no me sorprendieron, obviamente al principio sí, pero en el Juego Olímpico ya sabía que iban a rendir bien y que la iban a romper porque las vi todo el año con la soltura, frescura y desfachatez que tienen para jugar; porque muchas son bastante caraduras para jugar y no les tiembla el pulso al definir un penal, por ejemplo. Encima el grupo se nutrió de un montón de edades, culturas distintas porque estaban las más grandes con su forma de vida y vinieron las otras a revolucionar todo y a hacer un grupo súper divertido que nos sirvió muchísimo”.
“Ahora, es súper positivo que ya tengan inculcado cómo comportarse, porque son un montón de cosas para ser modelo y el día de mañana, con 25 años, estas chicas, sumada a Vale Raposo, jugarán un Juego Olímpico habiendo vivido de todo, con muchísima experiencia que van a aportar al seleccionado y a las futuras generaciones por venir.”, elucubró Alonso.
La número cinco de Argentina ha cumplido diversos anhelos a lo largo de su carrera hockistica, pero hay uno que todavía sigue en el tintero, listo para ser escrito, pero llevaría a otro que ningún amante del deporte quisiera que llegue… el final: “Con la camiseta argentina cumplí muchísimos más de los que alguna vez me imaginé, como sueño, con Las Leonas, quiero una medalla de oro antes de que termine todo. No me pongo plazos. No tienen valor. Creo que uno solo sabe cuándo no lo disfruta más, no quiere más, o no proyecta la vida de la manera que la fuiste haciendo. Siempre en el ideal de que no venga un técnico y te diga, ‘hasta acá’. Pero creo que se va a ir dando. No lo voy a hacer para siempre, me veo haciendo un proceso más, me gustaría jugar un Juego más y, hablando por hablar, no continuando después de un próximo ciclo olímpico.”
Además, Alonso enfatizó: “La vida es mucho más que hockey. Obvio que hoy es gran parte de mis días, pero siento que hay un montón de cosas más por disfrutar. El hockey, al ser prioridad, no te lo permite hacer de la manera que me gustaría. Yo hice una carrera y me gustaría también ver cómo me va dedicándome full time a ser kinesióloga, que es lo que estudié. Creo que hay un montón de cosas de la vida que es tan buena vivirlas. Si sigo haciendo hockey es porque todavía no encontré nada que me llene tanto como esto, pero, en el momento que llegue, voy a saber decir: ‘quiero otra cosa’”, sintetizó Agos.
Banco Nación y la vuelta a la Primera División del Metro
Tal vez sin buscarlo tanto, sino disfrutándolo y siguiendo un proceso de construcción desde la fecha uno, Agostina logró con su club retornar a la máxima categoría del Metropolitano y enunció algunos de los matices por los que se dio el ansiado regreso: “Banco está muy bien, el grupo está en un buen momento, estamos muy contentas con lo que logramos este año, la verdad que estoy conforme con el equipo que se formó, con la madurez que fuimos teniendo a lo largo de los partidos, que es algo que siempre critiqué”, comentó la mediocampista.
Las campeonas del Metropolitano -por última vez- en 2018 volvieron a tener diversas jugadoras en el seleccionado tras aquella época, la incorporación de Ariana Arias, Pilar Pisthon al Junior, y Lourdes Pisthon a Las Leonas, es un reconocimiento a la labor que está haciendo Nación y así lo indicó Alonso: “Es un montón. Para el club está buenísimo, porque nos suma muchísimo en el plantel. Pero habla también de un trabajo de formación de menores, no de este año, sino de muchos, que fue muy bueno para que tengamos tres pibas en el seleccionado”.
En el lapso de la construcción de su propia cancha en Olivares, y un poco antes también, en Nación ocurría que muchas chicas llegaban al club y se iban pronto en busca de nuevas opciones, pero la situación actual es otra y Agos se tomó el tiempo para reflexionar: “Sobre las chicas que hoy vienen y se quedan, creo que habla muy bien del grupo, de las personas que hay en Banco Nación, de cómo las hacemos sentir cuando vienen. Hoy tenemos para ofrecer un club con una cancha, un quincho y vestuarios. Que no es poco porque nunca lo tuvimos, entonces tenemos que valorar el lugar en donde estamos. Nuestro predio, que lo cuidamos un montón, porque es nuevo y lo queremos. Así que feliz con el presente. Ansiosa por el futuro”.
Alonso es parte de la redacción de las últimas páginas gloriosas de Las Leonas y asumió esa gran responsabilidad desde que sintió la camiseta argentina en su piel, pero Agostina caviló una respuesta para dejar entrever como quisiera que se acuerden de ella cuando su vida tome otro camino: “Me encantaría que sea como la que nunca dio una pelota por perdida, corrió todo hasta el final, que fue compañera, solidaria, y que siempre priorizó que se luzca el equipo antes que una sola persona. Creo que de esa manera vivo el hockey y de esa manera me gustaría ser recordada”, finiquitó la doble medallista olímpica.