El español de Aprilia comunicó que dejará la actividad al cierre de 2024, en medio de la emoción y el saludo de todos sus colegas.
Aleix Espargaró no podía elegir mejor lugar en el mundo para anunciar su retiro de MotoGP: el Circuito de Cataluña. Allí, donde de pequeño comenzó a construir su sueño de algún día ser piloto de motociclismo. Allí, donde logró dar finalmente sus primeros pasos en la actividad. Allí se sentó en soledad en una silla, ante la prensa, sus colegas y su familia y comunicó: “Este es un sitio muy especial para mí, donde crecí desde pequeñito y es el sitio perfecto para decir que decidí dejar las motos”, anunció el piloto de Aprilia.
Espargaró es el hermano mayor de Pol, también corredor y hoy en papel de probador de KTM y GasGas. Debutó en el Mundial en 2004 en la vieja categoría 125 cc, hoy renombrada como Moto3. Tras pasar por 250 cc, el de Granollers saltó a MotoGP en el GP de Indianápolis de 2009 en reemplazo de Mika Kallio. En 2011 bajó a Moto2 y desde 2012 es piloto full de la máxima categoría del Mundial. Llegó a Aprilia en 2017 y se dio el enorme gusto de lograr tres triunfos, el primero de todos en el GP de la Argentina de 2022. El año pasado festejó en Gran Bretaña antes de cumplir su sueño: ganó en Cataluña.
“Ni el mejor guionista de Hollywood hubiera imaginado que podría ganar careras a los 30 años y hacer podios con una marca que no lo había logrado nunca. Seguro que ese niño que debuto aquí hace muchos años estaría feliz. He cometido muchos errores en mi vida por elegir con el corazón y no con la cabeza. La cabeza me dice que puedo seguir, sigo siendo rápido, competitivo. Pero el corazón me pide parar, estar más tiempo en casa, ver crecer a mis hijos, estar con mi mujer. Así que decidí dar el paso al costado. Le agradezco a Aprilia por este sueño conseguido en estos años, a mis hijos, a mi familia, a mi hermano, que siempre fue…”, dijo Aleix antes de quebrarse en llanto.
Minutos después, todo el paddock se acercó para abrazar y saludar a Espargaró, ante la mirada de su esposa Laura y sus hijos, los mellizos Max y Mía. La previa de la sexta fecha del Mundial debería haber girado por la pelea en la tabla que lidera Jorge Martín, con 38 puntos de ventaja sobre Pecco Bagnaia 40 más que Marc Márquez y Enea Bastianini. Se deberían haber sumado capítulos en la novela que tiene a Ducati y su segunda moto de fábrica para 2025, con Martín, Marc y la Bestia como candidatos a ocuparla, con la situación del GP de India. Pero todo cambió de repente ante el anuncio de Aleix.