El colombiano, ya consagrado desde el GP de Japón, llega a Australia para superar una marca de Joan Mir e igualar otra de Valentino Rossi en la categoría menor del Mundial.
David Alonso llegará al GP de Australia, 17ª fecha del Mundial de Moto3, con su mochila mucho más liviana. Es que en Japón selló el título con cuatro citas de antelación. Pasó la locura, el festejo, el reencuentro con sus padres en España y llega una nueva carrera en el trazado de Phillip Island.
El colombiano tiene dos récords que puede batir en los cuatro Grandes Premios que quedan. En Motegi alcanzó su décimo triunfo de la temporada e igualó a Joan Mir como máximo ganador en una misma temporada desde que la categoría menor se llama Moto3. Si logra vencer en alguna del cuarteto que queda, se quedará con la marca en soledad. Pero hay más. Porque está a una de empardar a Valentino Rossi, quien, con 11 éxitos en un mismo torneo, tiene el récord histórico de la divisional más chica, en tiempos que su nomenclatura era 125cc. El registro que ya ostenta en soledad es el de más vencedor en Moto3 con 14 (venció cuatro veces el año pasado) y superó por una a Romano Fenati.
“Llegamos a Australia después de haber conseguido mi sueño de ser campeón del mundo. Será un fin de semana sin presión en lo que respecta al campeonato, pero lucharé para intentar igualar las victorias de Valentino Rossi. Quiero disfrutar del circuito, de las curvas rápidas, de la meteorología… El año pasado llovió, hubo viento y no fuimos rápidos en esas condiciones. Trataremos de hacer un gran fin de semana, sin bajar la intensidad”, dijo Alonso, quien ya sabe que el año que viene seguirá en el equipo Aspar Team, pero en Moto2.