El francés fue el más veloz en la jornada final de shakedown en Malasia. Fue el único que bajó de 1m58s. Desde el miércoles, los tests oficiales.
Fabio Quartararo dejó bien en claro al renovar con Yamaha por dos años que es la última chance que otorga a la espera de recibir una moto que lo vuelva a poner en la pelea por éxitos y títulos en MotoGP. También es cierto que la marca del diapasón le puso una cifra muy seductora al contrato: 12 millones por año. El matrimonio del francés con la marca comenzó con un aliciente, pero que no deja de ser apenas una referencia: el de Niza fue el más veloz de los tres días de shakedown en Malasia, que finalizó este domingo.
El campeón de 2021 fue el único piloto que logró bajar de 1m58s en las tres jornadas al marcar 1m57s794, un buen registro para un shakedown, pero lejos de aquel 1m56s337 que clavó Pecco Bagnaia en noviembre pasado para lograr la pole. Aunque, claro, son momentos distintos. Detrás de Quartararo quedó Jack Miller, con la Yamaha del Pramac, a 309 milésimas.
La actividad de la pretemporada 2025 seguirá desde el próximo miércoles, también en Sepang, con tres días de ensayos oficiales. El detalle es que allí sí ya podrán girar todos los titulares. El shakedown estuvo reservado para los pilotos de prueba y novatos de la categoría reina. Solo Yamaha y Honda, por las concesiones que otorga MotoGP para las marcas de peor rendimiento, podían disponer de sus corredores principales. Los del diapasón utilizaron la carta, mientras que los de ala decidieron no usarla y el que giró fue Aleix Espargaró, flamante tester, quien este domingo fue tercero.