El español de Ducati ganó todo lo que se puso en juego en 2025 y llega al Gran Premio de las Américas en Estados Unidos, una pista que le cae muy bien y en la que busca seguir la racha.
El circuito de Austin siempre representará algo especial para Marc Márquez. Fue allí, en 2013, donde consiguió su primera victoria en MotoGP, en su segunda participación, y se convirtió, a los 20 años y 63 días, en el ganador más joven de la historia de la máxima categoría del Mundial de motociclismo de velocidad, récord aún vigente. Casi 12 años, seis títulos, 189 carreras y 63 triunfos después, el español llega al GP de las Américas, tercera cita del ejercicio 2025, como líder en invicto en su primera temporada como corredor del equipo Ducati oficial.
El catalán ganó todo lo que se puso en juego en el año. Hizo pole, ganó el sprint y la carrera principal de Tailandia y la Argentina, para liderar el Mundial con puntaje ideal. Si a su presente se le suman sus números en Austin, no hay dudas que es el enorme candidato a quedarse con todo: logró siete triunfos y otras tantas pole positions. Las características del trazado texano, en el que se gira en sentido anti horario, le caen de maravillas a Márquez. El año pasado, en su primera temporada con Ducati (dentro del equipo Gresini), Marc fue tercero en la clasificación, segundo en el sprint y se fue al piso en la 11ª vuelta de la carrera principal mientras lideraba.
"El COTA es un circuito al que estoy especialmente unido. Y donde siempre he sido rápido, incluso el año pasado cuando lo afronté por primera vez a bordo de la Ducati”, dijo Márquez en la previa. “Llegamos a Austin después de dos fines de semana prácticamente perfectos, sobre todo el primero en Tailandia", agregó el español, hoy de 32 años.
En las dos citas disputadas en la 77ª temporada del Mundial, solo Álex Márquez pudo seguir el andar de Marc. Fue una cuestión de hermanos, con dos 1-2 en fila. El menor de la dupla se mostró muy competitivo con la Ducati del Gresini.
¿Y Pecco Bagnaia? Hasta ahora, el campeón 2022-2023 es el gran derrotado. De niño mimado y estrella principal de la escudería oficial Ducati a ser ampliamente derrotado por Márquez en su propia casa. El italiano quiere volver a la moto de configuración 2024 y abandonar el híbrido que maneja ahora (al igual que Marc), que es una Desmocedici de 2024 con evoluciones de 2025. La clara derrota en dos fechas de Pecco no pasó para nada inadvertida en el paddock.
"Todos sabíamos que Márquez tiene algo más y que subirse a una moto competitiva como es la Ducati, marcaría la diferencia. Pero quizá nadie esperaba el dominio tan claro e inmediato que está ejerciendo sobre Bagnaia", dijo Lucio Cecchinello, el dueño del equipo LCR-Honda. En la misma línea habló Stefan Bradl, probador de Honda y excompañero de Marc: “Bagnaia ya es claramente el número 2 de Ducati”.
Los números de Pecco en Austin no son canto a la ilusión de sus hinchas: el tercer puesto de 2021 fue su mejor resultado en seis carreras con MotoGP. Otro fin de semana perfecto del español puede ser un golpe muy fuerte para Bagnaia.
Este viernes comenzará la actividad con la primera tanda de ensayos y la práctica libre que otorgará diez boletos directos a Q2. Un dato: se esperan lluvias y tormentas para el inicio de la actividad.
