El líder del Mundial llega a una pista de las que menos le gustan, a pesar de ser su carrera de local. El español de Ducati puede ampliar su ventaja y llegar a Misano con chances de definir el título.
Apenas 100 kilómetros separan Cervera, la ciudad de nacimiento de Marc Márquez, del circuito de Cataluña, donde este fin de semana se disputará la 15ª fecha del Mundial de MotoGP. Por cercanía y ciudadanía, se trata de la carrera de local para el piloto de Ducati, pero, como dice el refrán: “En casa de herrero, cuchillo de palo”. No, el trazado de Montmeló no está en la lista de los más apreciados por el hexacampeón de la máxima categoría.
En su gigantesco palmarés que crece cada fin de semana de carrera, el líder del Mundial 2025 logró 72 triunfos en MotoGP, pero tan solo dos los logró en Cataluña, el último, en 2019. El envión con el que llega Márquez lo invita a soñar con sacarse la espina catalana: viene de enhebrar siete fines de semana perfectos, con victorias en sprint y carrera principal. El torneo está absolutamente resuelto, solo es cuestión de tiempo para sellar su séptima corona de MotoGP y la novena mundialista (igualará a Valentino Rossi). Marc líder con 175 puntos de diferencia sobre su hermano Álex y podría definir el pleito el próximo fin de semana en Misano, justo la casa del Doctor. Sería seis fechas antes del final.
Pero primero, lo primero: Cataluña. “Se confunden conceptos. Una cosa es que no me guste y otra que no intente ganar. Es diferente. Es verdad que es de los circuitos en los que toca trabajar un poquito más, arriesgar un poco más, de los que se me han atragantado más en el pasado, pero no significa que no intente dar 100%, que me gustaría estar en el podio y que intente ganar la carrera”, dijo Márquez en conferencia de prensa. “En general, lo que más me cuesta son las curvas a la derecha que son largas, rápidas, donde hay que tener un poquito más de control”, explicó.
Márquez prefiere evitar las cuentas para saber si llegará con chances de ser campeón a la próxima cita, especialmente porque el escolta es su hermano. El piloto de Ducati solo piensa en cada carrera: “Quiero seguir sumando puntos y no pensar en que tengo que ganar por ser Cataluña. Si no se puede ganar, tendré que mantener la calma y seguir anotando. Si lo hago, será cuestión de tiempo”.