El colombiano no se pudo meter en el grupo de los 14 de la práctica y deberá pasar por el filtro de Q1 en la 15ª fecha del Mundial.
David Alonso venía todavía con el aroma a champán después de su gran victoria en el GP de Hungría, en una carrera memorable. Fue su primer éxito en Moto2 y llegó a Cataluña, 15ª cita, con hambre de más, de lograr más festejos. Pero todo se complicó en un viernes difícil en el que, es cierto, le faltó suerte, pero también rendimiento en su moto del equipo Aspar.
Ya el primer entrenamiento libre había dado una pequeña muestra de complicación al quedar 14º, a 528 milésimas de Daniel Holgado, su compalero de equipo. Pero lo importante del primer día de actividad en Montmeló, como ocurre en cada cita del Mundial, se da en la práctica.
Ese es el momento en el que la parrilla se juega todo por encontrar un lugar entre los primeros 14. El premio es el mismo para el que termine como líder como el que ocupé el 14º puesto: boleto directo a Q2 y a luchar decididamente por la pole position. Alonso no logró meterse ahí y fue apenas 23º.
El campeón de Moto3 no había conseguido una buena vuelta hasta el final, pero quedaba la última chance. El objetivo era absolutamente alcanzable, pero ahí llegó la mala suerte. Collin Veijer tuvo problemas y se quedó parado en el primer sector de la pista. Entonces, banderas amarillas. Alonso pasó rápido por la zona y, claro, le cancelaron la vuelta por no respetar la zona de desaceleración. Resultado: al fondo y pasar por el filtro de Q1.
El objetivo de Alonso para pelear arriba sufrió un contratiempo. Este sábado deberá ganarse uno de los cuatro pasajes que entrega el primer segmento de qualy para llegar a la definición. El equipo tiene potencial y el segundo lugar de Holgado en la práctica (lideraba por Arón Canet) es la demostración.
"Es una pista que no es de mi estilo y me ha costado, pero, igual que al principio en Moto3, me costó muchísimo. Hay que frenar flojo, dejar correr la moto en la entrada de la curva... y estoy intentando ver qué puedo hacer, porque no estoy cómodo. En las curvas rápidas del final no tengo velocidad al inicio y luego ya no la recupero. Tenemos que trabajar con los datos para ver en qué podemos mejorar la moto, pero también tengo que cambiar yo mi forma de manejar aquí. Seguramente, ir detrás de alguien mañana para ver sus líneas nos ayudará también", analizó Alonso.