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Sin su mejor desempeño, Dallas bate a Houston en duelo por Texas

ARLINGTON -- Tony Romo hizo dos jugadas que cambiaron el rumbo del partido a favor de sus Dallas Cowboys.

Primero fue un pase de touchdown para Terrance Williams de 43 yardas, y luego otro para Dez Bryant en tiempo extra que preparó las cosas para que los Cowboys vencieran por 20-17 a los Houston Texans este domingo, frente a 91,159 aficionados en el AT&T Stadium de Arlington.

Romo y la línea ofensiva de Dallas hicieron lo suficiente para que los Cowboys alargaran su racha de victorias a cuatro en los primeros cinco juegos, hazaña que ocurre por primera vez desde el 2008.

"Los muchachos [linieros] hicieron un trabajo excepcional", dijo el entrenador en jefe de los Cowboys, Jason Garrett. "Ejecutaron el plan a la perfección. Sabíamos que nuestras posibilidades de ganar incrementarían si evitábamos daño de Watt, un muy buen jugador".

Romo y el resto de los Cowboys distaron de ser perfectos.

Primero, el corredor DeMarco Murray soltó el balón en zona roja, cuando parecía que los Cowboys se acercaban a abrir el marcador en el primer cuarto. Fue el cuarto fumble en la temporada para Murray, quien en sus primeros tres años en la liga sólo perdió tres balones.

"Nadie está más consciente de que tienen que parar esos errores que DeMarco", dijo Garrett. "Se ha preparado como nunca. A veces sólo son ese tipo de situaciones de mala suerte".

Por otro lado, Murray se convirtió en el primer corredor de los Cowboys que inicia una temporada con 100 yardas o más en los primeros cinco juegos de la temporada.
Terminó con 118 yardas y el lunes amanecerá de nuevo como el líder corredor de la liga.

Romo fue interceptado también dentro de la zona roja de Houston, cuando parecía que los Cowboys se recuperarían del primer touchdown del juego, de Arian Foster. Pero a partir de ahí, su desempeño mejoró y en eso la línea ofensiva de los Cowboys tuvo mucho que ver.

Mantuvieron al ala defensiva J.J. Watt --para muchos el mejor jugador de la liga-- alejado del balón, como se había planeado en la semana.
El daño de Watt fue mínimo: sólo cuatro tacleadas, sin captura ni intercepción, y mucho menor presión a Romo de la que había dado a los cuatro mariscales de campo que había enfrentado antes de llegar al AT&T Stadium.

"Hay que dar crédito a la defensiva de los Texans", dijo Romo. "Quizá es la mejor que hemos visto. Después, hay que aplaudir a nuestra línea ofensiva. Pudieron mantener la protección, abrir huecos y hicieron el trabajo más fácil".

Dallas cometió errores de relajación, cuando parecían tener el partido ganado en el cuarto periodo.

Primero, a la ofensiva entregaron el balón en despeje en su penúltima serie en la que cometieron dos errores mentales, retraso de juego y pase lanzado de manera ilegal, al no haber receptor en la zona.
De ahí, los Texans (3-2) hilvanaran la serie que parecía ganar el juego en el último cuarto, en la que Dallas permitió 45 yardas en apenas cuatro jugadas y 1:18 de tiempo para empatar, y mandar el juego al alargue.

La defensiva de Dallas permitió 330 yardas --244 de ellas en la segunda mitad-- a una ofensiva de Texans que, salvo a Foster, traen casi nada. Foster logró 127 yardas en 21 acarreos, el más largo de 33, y un touchdown.

El mariscal de campo de los Texans, Ryan Fitzpatrick, lanzó para 154 yardas, sin touchdown y con una intercepción.

"Pero fue insuficiente", dijo Foster. "Nos ganó un buen equipo de fútbol americano. Pero creo que pudimos hacer más esta tarde, en especial en la primera mitad. Casi regalamos los primeros 30 minutos de juego".

Los Cowboys todavía pudieron mover el ovoide hasta que su pateador de lugar intentó sin éxito un gol de campo de 53 yardas para ganar en los tres segundos finales. Dan Bailey falló su primer gol de campo de la temporada, luego de 10 anotaciones consecutivas.

Al final, el jugador más consistente de los Cowboys durante los últimos cuatro años tuvo su premio: metió el gol de campo ganador, después de que Romo completó un pase de 37 yardas a Bryant que parecía imposible.

"Sabía que Dez tenía cobertura personal y que podía hacer una jugada", explicó Romo. "Tuve mucha presión en la jugada y sólo traté de lanzar un pase que diera oportunidad a Dez de atraparla, de hace una jugada, y lo hizo".

La próxima semana, los Cowboys (4-1) tendrán que visitar a los campeones de la NFL, los Seattle Seahawks, antes de volver a casa para recibir tres partidos consecutivos.