Los Cardenales y los Piratas han estado jugando desde 1882, pero esta será la primera vez que choquen uno contra el otro en un juego de postemporada. Los Piratas no ganan una serie de postemporada desde 1979 cuando se recuperaron de un déficit 3-1 para vencer a los Orioles en la Serie Mundial, mientras que los Cardenales han ganado 16 series de playoffs desde ese entonces.
Estos dos equipos jugaron en 19 ocasiones esta temporada y los Piratas se llevaron la serie 10-9. Pittsburgh anotó 4.5 carreras por juego, y los Cardenales anotaron 4.6. La cosa no puede estar más cerrada.
Aquí les presentamos cinco preguntas a considerar antes del comienzo de la serie el jueves:
¿Qué tipo de impulso llevan los Piratas?
El PNC Park fue un gran escenario para el juego de comodines del martes en la noche – todo el mundo vestido de negro, una celebración del beísbol de postemporada en Pittsburgh por primera vez en 21 años. Fue un tributo a Roberto Clemente, Bill Mazeroski, Willie Stargell y todos los Piratas que ayudaron a ganar banderines en el pasado.
Russell Martin, quien ha ayudado tanto como cualquier otro en la virazón de los Piratas este año, se convirtió en el séptimo jugador – y solo el segundo receptor, junto a Yogi Berra – en conectar dos cuadrangulares en un juego de vida o muerte.
Martin la catalogó como "la multitude más ruidosa que yo haya escuchado jamás". El PNC debe ser aun más ruidoso para el Juego 3 ante los Cardenales, en especial si los Piratas pueden sacar una victoria en San Luis.
¿Cuánto echarán de menos los Cardenales al lesionado Allen Craig?
Solo pregúntenle a cualquiera en el equipo y ellos te dirán que el tipo que querrían tener en el plato en una situación clave es Allen Craig.
Remolcó 97 carreras. Bateó .454 con corredores en posición de anotar y .448 con corredores en posición de anotar y dos outs.
Además, los Cardenales no son tan productivos ante pitcheo zurdo como lo son ante los derechos. Ellos promedian .238 con un OPS de .672 ante los zurdos, pero ante los diestros esos números aumentan a .280 de promedio y OPS de .755.
El reemplazo de Craig, Matt Adams, tuvo el slugging más alto (.503) de los Cardenales. Él es peligroso, pero sus números contra los zurdos no son los mismos tampoco: promedio de .231 con cero boletos y 19 ponches en 52 turnos.
Con un Craig saludable, los Cardenales siempre tenían un bateador realmente peligroso en la banca para producir cuando fuese necesario al final de los partidos. Pero ahora no lo tienen.
¿Cómo podemos explicar a Marlon Byrd?
La carrera de Byrd estuvo cerca de terminar; entonces firmó con los Mets en febrero, fue su mejor bateador en esta temporada, y fue adquirido por los Piratas para la recta final. Siguió con su bate encendido, y en los primeros dos juegos de la crucial serie del pasado fin de semana ante los Rojos, se fue de 8-6.
En el juego de comodines, Byrd conectó cuadrangular en su primer turno al bate luego de haber participado en 1,250 juegos sin haber hecho una sola aparición en los playoffs. El último jugador en participar en tantos juegos de serie regular y conectar HR en su primer turno en la postemporada fue Brooks Robinson, quien participó en 1,406 juegos antes de conectarle cuadrangular a Don Drysdale en la Serie Mundial de 1966.
La postemporada está llena de historias de jugadores que han llegado tarde a un equipo en la parte final de una temporada y ha ayudado a ese equipo a llegar a nuevoas alturas, como Cody Ross en la postemporada del 2010 para los Gigantes. Quizás es el momento de Byrd.
¿Están listos los jóvenes lanzadores de los Cardenales para la presión de la postemporada?
Casí el 40 por ciento de las entradas de los Cardenales fueron lanzadas por novatos.
Ellos ganaron 37 juegos, tuvieron efectividad por debajo de 3.20 y promediaron casi un ponche por entrada. Shelby Miller, Michael Wacha, Trevor Rosenthal y otros son lo suficientemente buenos como para lidiar con la presión.
En ocasiones el talento es más importante que la experiencia. Además, Rosenthal y Joe Kelly, es su segunda temporada, probó el sabor de la postemporada en el 2012.
¿Alguno de los dos equipos tiene ventaja en cuanto al pitcheo abridor?
La cosa está cerrada.
Los abridores de los Cardenales tuvieron marca de 77-46 con efectividad de 3.42 y 15 blanqueadas. Los abridores de los Piratas compilaron record de 64-48 con efectividad de 3.50 y 16 blanqueadas.
La diferencia podría ser el as de San Luis Adam Wainwright, quien tuvo marca de 19-9 este año. Tendrá su descanso completo para el Juego 1 y podría volver para el Juego 5, en caso de ser necesario. Abrió en tres ocasiones ante los Piratas este año, con marca de 1-0, promedio de bateo de los contrarios de .208 y 20 ponches en 21 entradas.
Mi selección: Cardenales en cinco.