La judoca mexicana recibió una cantidad de presupuesto lejana a los atletas de tiro con arco, clavados, atletismo o con proyección de medalla
Había poca confianza en Prisca Awiti. La judoca mexicana había pasado desapercibida por las autoridades en los Juegos Olímpicos 2024 y en casi todo el ciclo rumbo a la competencia que se organizó en París.
En el tatami de París, Francia, se veían pocas banderas de México y las autoridades deportivas del país prefirieron voltear a otras disciplinas. Al final, una de las deportistas que menos recursos recibió durante el ciclo olímpico fue la que se llevó los reflectores al ganar medalla de plata en la categoría de -63 kilogramos, la segunda para la delegación tricolor.
“Los que me han apoyado gracias, siento sus vibras, su energía conmigo, esto no sólo es mío, es de todo el equipo, muchas gracias y espero llegar con una medalla a México”, decía Prisca Awiti, cuando estaba a una ronda de ganar la medalla de plata.
Las autoridades habían apostado por otras disciplinas. La presidenta del Comité Olímpico Mexicano, María José Alcalá, iba y venía de la arena, mientras que de Ana Gabriela Guevara, titular de la CONADE, ni sus luces. Prisca Awiti sí estaba acompañada, pero de su familia y compañera de equipo, Paulina Martínez, que la apoyaban desde las gradas.
En los presupuestos de medalla, Prisca Awiti no aparecía. La atleta recibió, de acuerdo a documentos obtenidos por ESPN, menos de cinco millones de pesos para su preparación de cuatro años y su beca deportiva, que otorga la Conade, es una cantidad lejana a los presupuestos de los atletas de disciplinas como tiro con arco, clavados, atletismo, con proyecciones de medalla.
En cuatro años, por el concepto de becas deportivas, Prisca Awiti recibió un millón 491 mil pesos, lejos de los cinco millones 345 mil pesos que recibieron de manera individual, por el mismo concepto, deportistas mexicanas que ya ganaron preseas en París 2024.
Conforme fue avanzando la competencia, Prisca Awiti se fue quedando más sola, debido a que los papás de la atleta mexicana sólo compraron entradas para las preliminares, no tenían boletos para las semifinales ni para la final, por lo que tuvieron que ver la transmisión desde una laptop y sólo sus hermanos pudieron estar en las gradas.