La taekwondista mexicana señaló que la disciplina ha evolucionado en corto tiempo y que han surgido países que antes no aparecían en los primeros planos
La taekwondista mexicana Daniela Souza cree que México ha dejado de ser potencia en su disciplina dentro de los Juegos Olímpicos, pues señala que ha "evolucionado mucho" durante "estos últimos ciclos".
"El taekwondo ha evolucionado mucho en mi parecer; hablando desde los petos tradicionales hasta los petos electrónicos, los rounds que antes eran continuos en puntaje y ahora se reinician en cada round. La dinámica ha cambiado mucho, el nivel de exigencia de las competidoras, la participación de atletas por continente; antes no se veía a los africanos como potencia, ahora han ganado medallas olímpicas y se ha incrementado la exigencia del taekwondo, porque sea globalizado. "
"Puede que México haya dejado de ser una de las potencias principales, pero seguimos dando resultados en otros eventos. Desafortunadamente no puedo justificar la falta de medallas en Juegos Olímpicos porque es real, pero estamos en la lucha, estamos en un periodo de ajuste y de adaptación porque el deporte se ha desarrollado mucho en poco tiempo y no es tan fácil tener un resultado inmediato cuando las cosas cambian de esta forma", expresó
De igual manera, Daniela Souza se dijo consciente que se han destinado muchos recursos para el taekwondo, pero "el dinero tampoco lo es todo", porque "los millonarios tendrían muchas medallas olímpicas".
"Hay muchas cosas detrás y es mucho más complejo. No es algo tan fácil de conseguir y nosotros siempre tratamos de buscar ese logro, pero cada vez es más difícil de conseguir".
Respecto a su parso por los pasados Juegos Olímpicos, Daniela Souza reconoce dolor emocional por la derrota en octavos de final ante la tunesina Ikram Dahri, debido a descalificación por acumulación de amonestaciones, pero lo toma como aprendizaje de cara a otro posible ciclo.
"Un resultado no define una persona, el futuro del deporte y tampoco significa que todo está perdido o que no hemos hecho las cosas bien. Hablando técnicamente de mi resultado, y de lo que sucedió, me quedo con esa experiencia muy específica de lo que puedo vivir nuevamente de no recibir una advertencia del juez".
"Me encantaría representar a México otra vez en unos Juegos Olímpicos, porque esta vez sería de 'este lado del charco', pero soy consciente de que debo de conectar, no sólo mi intención de ir, sino también mi cuerpo y mi espíritu y mi voluntad. Tengo que armar muchas cosas para iniciar un nuevo ciclo; no quiero relacionar lo que pasó en París y llevarme una carga extra al próximo ciclo", dijo.