Se sacaron la espina. Quebraron el maleficio. Rompieron la mala racha.
La repetición de conceptos se justifica por la importancia del hecho. 343 fueron los días que estuvo la pareja número dos del mundo, del argentino Federico Chingotto y el español Alejandro Galán, sin poder ganarles a los líderes del ránking, el catamarqueño Agustín Tapia y el ibérico Arturo Coello.
Lo volvieron a conseguir en el lugar más indicado, la final de un Major, el de Roma.
En un foro itálico colmado, Chingotto y Galán jugaron un pádel extra veloz y muy efectivo para quedarse con el triunfo por 6-3 y 7-5, y así defender el titulo que habían conquistado en este mismo torneo la temporada pasada.
Aprovecharon una versión algo fría de los Nº1. Porque Coello estuvo algo estático y a Tapia le faltó el picante de otras ocasiones.
De esa forma, Chingotto dominó al vallisoletano en el cruzado de drives (por momentos recordó a lo que ocurría a mediados del año pasado, cuando los Nº2 ejercían cierta supremacía sobre los líderes), mientras que Galán armó un festival de smashes ganadores ante cada globo corto de sus rivales.
En el primer set, el dominio de 'Chingalán' fue nítido.
En la segunda manga, reaccionaron Tapia y Coello. No obstante, a diferencia de otras ocasiones, esa levantada no encontró una desconexión de los Nº2. Entonces el partido se volvió más intenso y, cuando todo parecía indicar que el destino era el tie break, el Súper Ratón y Ale forzaron un quiebre de saque en el décimo primer game.
Momento más que decisivo, porque quedaron con el saque para cerrar el partido. Y así lo hicieron, sin dudar ni un segundo.
Tiempo de festejos para los Nº2 y una duda que queda en el aire: a partir de esta inyección de confianza, ¿volverán a emparejar el 'head to head' ante Agustín y Arturo?