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Nneka Ogwumike: "Cuando aceptas tu altura, es una sensación muy linda"

Esta es una historia exclusiva de la edición 2017 del Body Issue de ESPN The Magazine. Suscríbete ahora

Es difícil que Nneka Ogwumike pase desapercibida. No solo porque mide 6-2, sino por los otros puntos altos que la definen. Seleccionada N° 1 en el draft de 2012, Novata del Año de la WNBA en 2012, tres veces All-Star de la WNBA, MVP en 2016 y presidenta de la Asociación de Jugadoras de la WNBA. Y por todo eso es aún más sorprendente saber que Ogwumike afirma que era horrible jugando al básquetbol cuando niña. En realidad, en el noveno "Body Issue" anual de ESPN The Magazine, esta ala-pívot compartió muchos datos sorprendentes con el periodista Morty Ain, incluso su aversión a levantar pesas y el componente N° 1 de su dieta: donas.


Soy una "nerd", seguro. La mayoría de las personas lo atribuiría a que estudié en Stanford, pero he sido una "nerd" mucho antes que eso. Simplemente, me encanta aprender. Miro muchísimos documentales referidos a los animales. Me interesa mucho la ciencia y la anatomía y fisiología. Muchas personas se burlan de mi porque sé todos esos datos al azar, porque busco todo en Google.

También sé mucho sobre lo que los alimentos hacen al cuerpo. Sé que los pepinos son lo mejor para agregar a tu agua. Tienen una cantidad de vitaminas, pero también aceleran la hidratación. Uno siempre debería beber un vaso de agua de pepinos cuando se levanta y antes y después de cada comida; yo sé eso. Mi refrigerador está lleno de pepinos.

En general, el té es lo más recomendable. Si bebes té, te salvará la vida. Tomo seis tazas de té por día. Pero las donas son mi kryptonita, sin duda alguna. Krispy Kreme, específicamente. Puedo comer una docena de donas de una vez. Fácilmente, hago eso cada tres meses. Es justo cuando uno lo presiente, sabes. Una mañana cada tantos meses, me despierto y digo, "Este es el día". Me levanto y me digo “Estoy yendo al cartel de ‘Calientes ahora’”. [Ríe]

Cuando era niña, era una gimnasta, pero mi instructor de gimnasia le dijo a mi madre que podría ser muy peligroso para mi si continuaba. Yo era demasiado alta para los saltos mortales y las volteretas que estaban enseñando. Era posible que me golpeara la cabeza en la barra de equilibrio, pero incluso cuando estaba haciendo volteretas, mi cuerpo era demasiado largo para lo que se enseñaba. Tenía unos 9 o 10 años, estaba realmente triste. Nunca había demostrado interés alguno en otros deportes; me sentía que no sabía qué hacer. ¡Mi vida se estaba desmoronando a la madura edad de 10 años! [ríe] Así que fue entonces cuando comencé a jugar al básquetbol.

Comparada con las otras niñas, yo era como un grano en el medio de tu frente. Yo creía realmente que iba a ser "lo más" cuando comencé a jugar [al básquetbol] porque les llevaba una cabeza a todas las demás, pero mis habilidades estaban bajo cero. Oh, amigo, yo solo tenía mi estatura. Medía 5-10 cuando tenía 11 años, así que todas me querían en su equipo. Creo que se conformaban con intimidar a las oponentes.

La rutina de driblear con dos pelotas [en la práctica de AAU] era el momento más embarazoso de mi vida. Todavía me persigue hasta el día de hoy. Me decía a mí misma "Oh, Dios mío, esto no es para mí en absoluto". Estoy segura que los demás se reían, pero lograban ocultarlo.

Incluso hoy mismo, yo me pondría en la categoría de novata [de básquetbol]. Hace apenas cinco años que estoy en la liga y aunque hemos tenido una excelente temporada el año anterior con mi equipo, siento que todavía puedo aprender y mejorar. Y cuando juego en el extranjero, también pienso que puedo aprender y mejorar. No solo en la cancha, sino también como alguien que asume un cargo de liderazgo.

Ogwumike se traduce como “guerrero” y eso me define totalmente. ¡Mi padre me dijo eso, así que supongo que no mentía! [Ríe] Mejor que no lo haya hecho, porque es una parte principal de mi identidad. Creo que esa sola palabra puede describirme a mí y a mi experiencia en la temporada 2016, sin ninguna duda.

Me crié con tres hermanas, así que la palabra "compartir" debe estar escrita en algún lugar de mi certificado de nacimiento. Es algo gracioso, porque las tres practicamos deportes, es como si mi madre hubiera tenido tres hijos varones. Todas tenemos un espíritu competitivo, ya sea en la cancha, fuera de ella, en la escuela ... en todo lo que hacemos, nos esforzamos por destacarnos porque sabemos de lo que somos capaces. Es bastante especial.

Espero que la gente no piense que está mal, pero yo me inclino más por ver un episodio de "Familia Moderna" que por mirar un partido de básquetbol. Mis hermanas me hacen bromas porque realmente no soy muy seguidora de los deportes. Yo lo sé. Es que yo no soy una adicta a los deportes. Así también soy como jugadora. Juego por lo intangible.

Tampoco estoy pendiente de las estadísticas. Lo único que puedo registrar en mi mente son las recuperaciones de posesión. La mayoría de las veces no sé realmente contra quién jugaremos hasta el día del partido. Lo tomo día por día. Si tengo práctica, tengo práctica. Si jugamos contra Minnesota, jugamos contra Minnesota.

No estoy tratando de despreciar a las personas bajas, pero creo que ser alta es una bendición. Estoy muy agradecida por lo que mis piernas pueden hacer, porque puedo saltar súper alto. No sé cuál es mi alcance vertical exactamente, pero puedo volcar. Cuando una termina por aceptar su estatura, es todavía más hermoso que solo ser alta.

No estoy segura si está bien hablar de esto, pero lo voy a hacer de todas maneras: Cuando era más chica, no creía que tener un trasero grande era bueno. Estaba muy acomplejada cuando jugaba al vóleibol porque teníamos que usar la faja Spanx, pero después de un tiempo, me dije, “¡Eh, esto es asombroso!”

Mis reflejos son asombrosos. Uno de mis mantras que siempre les comento a mis bases es "cualquier pase que yo pueda atrapar es un buen pase”. Puedo atrapar casi cualquier cosa. Cuando dejo caer mi teléfono, siempre lo atrapo a tiempo. Siempre. Y soy bastante torpe. Tropiezo muchas veces, pero no siempre termino en el suelo. O tal vez debería decir que tengo traspiés, pero no me caigo.

Uuuy, ni siquiera digan levantamiento de pesas cerca mío. El solo pensar en levantar pesas me revuelve el estómago. Puedo ganar masa muscular porque es mi trabajo. En mi año como juvenil levantábamos pesas y yo pesaba usualmente entre 185 y 190 libras (84 y 86 kg); cuando terminé ese año, pesaba 210-212 lb (95.5-96 kg). Era todo músculo. Pero no puedo levantar mucho. Así que hago mucho pliometría, trabajo en la cinta, "medicine ball", "BOSU ball", abdominales, "core". Eso mantiene mi resistencia de fuerza sin aumentar la masa muscular.

Un esfuerzo profundo y global para mí es saber lo que valgo. Las personas pueden ser humildes, pero yo también creo que una puede ser demasiado humilde. Una no debería desacreditarse nunca a sí misma. Es bueno palmearse la espalda a veces, y he aprendido a hacerlo. No tiene nada que ver con ser arrogante.

Yo era demasiado humilde en la universidad. Cuando ahora pienso en mis logros universitarios, me digo, “Caramba”. Por algo es que estoy aquí.

En términos de básquetbol, yo diría que soy de buen material. Quiero decir que nadie va a perder dinero conmigo. Pongámoslo de esa manera. Sí, yo diría que soy una de las mejores en este momento.