<
>

Sin Kawhi Leonard, los Spurs enfrentan un futuro incierto

Getty Images

SAN ANTONIO - En privado, los funcionarios de los San Antonio Spurs admiten sin demora que no son inocentes en este fiasco.

Pero la dolorosa decisión del club de finalmente aceptar el miércoles la demanda de cambio de Kawhi Leonard hundió a la fraquicia a una profundidad en un periodo de transición que ha trabajado mucho para mantenerse por delante.

Incluso, antes de que San Antonio cambiara a Leonard (y a Danny Green) a Toronto en un movimiento que involucró a DeMar DeRozan, varias señales indicaban que los 21 años de los Spurs clasificando a la postemporada de forma seguida podrían estar en peligro. La presidenta y codirectora ejecutiva, Julianna Hawn, solicitó el divorcio al expresidente y consejero delegado, Peter Holt, en diciembre pasado, aunque le dijo a una televisora local que la “franquicia es segura” y no se pondría en venta. El incondicional de la franquicia, Tim Duncan, a quien se acredita ampliamente por ayudar a crear la cultura de desinterés del club, se retiró en 2016. Tony Parker, el veterano base, firmó con los Charlotte Hornets en esta temporada baja. Y la incertidumbre abunda sobre el futuro del escolta Manu Ginobili, así como el entrenador Gregg Popovich.

La esposa de Popovich, Erin Popovich, falleció en abril y se desconoce cuánto tiempo más planea liderar a los Spurs. Las fuentes dicen que esta temporada baja representa la mejor cantidad de exposición que el equipo ha tenido del entrenador Popovich, que a pesar de que ha estado en gran parte ausente, se ha mantenido involucrado en asuntos cotidianos de San Antonio ya que recientemente promovió a la entrenadora asistente Becky Hammon para reemplazar James Borrego, quien fue contratado como entrenador de los Charlotte Hornets en mayo.

Eso nos lleva de vuelta a Leonard, una vez que la única constante que se espera que sea el período de transición más importante de San Antonio desde los años 90.

El Leonard, la franquicia empleó al único jugador que podría construir un roster completo para seguir siendo competitivo. San Antonio esperaba que Leonard sirviera de puente para la próxima era de los Spurs.

Pero una lesión, la falta de comunicación, un potencial error de diagnóstico y malos sentimientos con respecto a todo resultó en un jugador que pidió a Popovich ser cambiado por segunda temporada baja seguida. (LaMarcus Aldridge pidió ser cambiado el verano pasado, pero una reunión cara a cara con Popovich suavizó la relación).

A pesar de ser elegible para recibir una extensión súper máxima este verano con valor de $221 millones de los Spurs, Leonard quería salir de San Antonio por varias razones. Él se sintió traicionado por el equipo por el manejo de la lesión en el cuadriceps que solo le permitió jugar nueve partidos la temporada pasada -además el equipo de Leonard cree que los Spurs también diagnosticaron mal la lesión en la muñeca- y también por la resistencia encontrada por la franquicia para buscar opiniones externas. Sin mencionar lo que parecía ser un cuestionamiento público de parte de los integrantes de la organización y las fuentes dijeron que el alero había sido médicamente habilitado para jugar desde diciembre.

Hubo referencias constantes de Popovich a Leonard y su “grupo”, comentarios mordaces de Parker, quien dijo que su ruptura en el cuadriceps en la temporada anterior fue “100 veces peor”, así como la reunión de jugadores con Leonard en marzo, en la que el alero se sintió emboscado por sus compañeros a instancias de Popovich.

“No sé cuando él y su grupo van a sentir que están listos para salir”, dijo Popovich en abril. “Cuando él y su grupo se sientan listos, entonces él estará listo”.

La franquicia también albergaba cierta mala voluntad, pero consideraba que Leonard era tan importante que estaba dispuesto a trabajar durante los tiempos difíciles para hallar una solución. A los Spurs no les gustó ceder el control de la situación médica de Leonard a médicos externos y se sintieron molestos por el manejo de la situación por parte de los representantes del alero -es decir el tío Dennis Robertson- quien, como Leonard, no necesariamente sobresalió en el departamento de comunicación, según las fuentes.

En más de una ocasión, Popovich le suplicó a Leonard que le permitiera anunciar a los medios que al alero se vería obligado a ausentarse de la temporada por la lesión, según fuentes que conocen la situación. Como creía que eventualmente regresaría, Leonard lo declinó cada vez y dejó a Popovich con preguntas que no podía responder a los medios. Popovich simplemente no lo sabía.

Leonard abandonó al equipo en dos ocasiones la campaña anterior para rehabilitarse en Nueva York -con integrantes del equipo de rehabilitación de los Spurs- para trabajar en con el personal médico externo del alero, utilizando su programa de trabajo.

Los Spurs aún creían que la relación valía la pena rescatarla, y Popovich viajó al sur de California antes del draft de la NBA para reunirse con Leonard como un primer paso hacia la reconciliación.

“Kawhi y su familia significan mucho para la organización y para la comunidad”, dijo el gerente de los Spurs, R.C. Buford, la noche del draft. “Si bien ninguno de nosotros desearía que estuviéramos donde estamos, haremos lo que podamos para construir una mejor relación posible con él y exploraremos nuestras opciones. Pero la primera sería hacer lo que podamos para mantener a Kawhi como parte de nuestro grupo”.

Como esa opción fuera de escena, San Antonio debe seguir adelante con lo que ha recuperado del cambio del miércoles: DeRozan, Jakob Poeltl y una selección protegida de primera ronda del 2019, mientras los Spurs pasan a un periodo de transición más significativo en la historia de la franquicia.

Buford siempre supo que estos días llegarían, con o sin Leonard.

“Todos estamos navegando juntos”, dijo Buford a ESPN en marzo pasado, cuando le preguntaron sobre el próximo periodo. “Nuestra coherencia se deriva de las personas que hemos tenido que han dedidado su tiempo y experiencia a nuestra organización. Es evidente por nuestros jugadores, nuestro personal, las personas que dirigen y promueven nuestras operaciones comerciales.

“Hay muchas sucesiones que están pasando en esta parte de la historia de nuestra franquicia. Y todos nos hemos centrado en esto, no solo este año, sino durante muchos años”.