Isiah Thomas dice que pagó un "precio alto" por negarse a estrechar la mano de Michael Jordan y los Chicago Bulls en los playoffs de 1991, pero Bill Laimbeer no se arrepiente de la decisión de los Detroit Pistons.
Thomas habló sobre su legado y su relación con Jordan en una entrevista con 'Get Up' de ESPN el lunes por la mañana, un día después de que la rivalidad entre los Pistons y los Bulls se relatara en el Episodio 3 de 'The Last Dance'.
"Estábamos bajando, Michael Jordan subía", dijo Thomas. "Al subir tienes ciertas emociones, y al bajar de ser campeón, tienes otras ciertas emociones... Viendo hacia atrás, a lo largo de los años, si hubiéramos tenido la oportunidad de hacerlo de nuevo, creo que tomaríamos una decisión diferente".
Después de eliminar a los Bulls de tres postemporadas consecutivas y de dejar a Jordan en el camino, Thomas y los Pistones de los 'Bad Boys' fueron barridos por Chicago en las finales de la Conferencia Este de 1991.
A falta de 7.9 segundos y perdiendo por 21 puntos ante los Bulls para terminar la serie, los Pistons, a instancias de Laimbeer, según Thomas, salieron de la duela sin estrechar las manos de los jugadores de los Bulls, ni felicitarlos.
"He pagado un precio alto por esa decisión", dijo Thomas. "Entiendo que este es el mundo de los deportes, pero mirando hacia atrás en términos de cómo nos sentimos en ese momento en particular, nuestro estado emocional y cómo salimos de la duela, la realidad es que le dimos al mundo la oportunidad de mirarnos de una manera en la que nunca tratamos de posicionarnos o proyectarnos. Es lamentable que haya sucedido".
Sin embargo, Laimbeer le dijo a Rachel Nichols en una entrevista que saldrá al aire el lunes en The Jump de ESPN, que todavía apoya la decisión de los Pistons, a casi 30 años después, independientemente de la percepción pública.
"¿Por qué me arrepentiría hoy? No me importa lo que digan los medios sobre mí. Nunca lo hice", dijo Laimbeer. "Si lo hiciera, sería una basura, especialmente en aquel entonces.
"Estaba a punto de ganar campeonatos e hice lo que tenía que hacer para aprovechar al máximo mi capacidad y la de nuestro equipo, y lo hicimos. Al final del día, nos llaman campeones mundiales".
Thomas mostró un tono mucho más conciliador en su entrevista el lunes por la mañana, diciendo que está "personalmente herido" por su participación en el documental y se disculpó con la ciudad de Detroit.
También se le preguntó al guardia del Salón de la Fama sobre ausencia en la lista del Dream Team de 1992 en los Juegos Olímpicos de Barcelona, y si creía que su negativa a estrechar la mano de Jordan era un factor.
"Yo debería haber estado en ese Dream Team", dijo Thomas. "Sin embargo, no fui parte de eso. Eso me hizo daño y si esa es la razón por la que no estuve en el equipo, entonces hoy estoy más decepcionado de lo que estaba en aquel entonces cuando no fui seleccionado".
Pero Laimbeer no se disculpa, y le dice a Nichols que Jordan y los Bulls fueron "llorones".
"Se quejaron y lloraron durante un año y medio acerca de lo malos que fuimos, pero lo más importante, dijeron que éramos malas personas", dijo Laimbeer. "No éramos malas personas. Solo estábamos actuando como jugadores de baloncesto, y eso se me quedó grabado porque no sabían quiénes éramos o de qué éramos como individuos y en nuestra vida familiar.
"Por todas esas quejas no quería estrecharles la mano. Eran llorones, ganaron la serie, denles crédito: nos hicimos viejos y nos superaron. Pero está bien, sigan adelante".