La “diversa experiencia” del recién contratado coach de los Minnesota Timberwolves Chris Finch es lo que intrigó al presidente deportivo del equipo, Gersson Rosas, para tomar la decisión.
En la conferencia de prensa para presentar al nuevo estratega, Rosas dio la bienvenida a al ex asistente de los Toronto Raptors para intentar dar un giro de 180 grados tras el despido de Ryan Saunders luego de la derrota del domingo en New York.
“Las cosas que (Chris) ha hecho como entrenador alrededor del mundo en distintos niveles, esas experiencias, son muy relevantes para la actualidad del basuetbol”, dij Rosas. “Jugamos un deporte muy internacionalizado en la NBA y la experiencia que Chris tiene, su perspectiva, el tiempo que ha sido coach fuera de la NBA, también como asistente en la NBA, esas perspectivas, esa experiencia es realmente importante para nuestra organización dentro y fuera de la duela”.
Además de las paradas de Finch en Houston, Denver, New Orleans y Toronto como asistente, también trabajó como coach de la filial de los Rockets en la G League, los Rio Grande Valley Vipers, que ganaron el campeonato en 2010.
Internacionalmente, Finch entrenó en Inglaterra, Alemania y Bélgica.
“Me gustaría ser juzgado por victorias y derrotas. De eso se trata. Esto se trata de ganar y ojalá podamos acumular algunas victorias”, dijo Finch. “Más allá de eso, queremos ver el crecimiento de nuestros jugadores jóvenes y queremos desarrollar identidad. Si logramos esos tres aspectos, es un cuadrangular, si tenemos dos de los tres, será un gran paso adelante”.
Aunque el momento de la contratación no es el mejor, con Minnesota en medio de una racha de cuatro derrotas y con la peor marca de la liga (7-24), Finch intenta sacar el mayor provecho de la situación.
“Esta es una situación menos que ideal para un coach y no tenemos un verano, no tenemos pretemporada, pero así es la vida en algunas de las ligas en las que he entrenado y esos retos realmente han dado forma a mi determinación y a mi habilidad para estar preparado y tomo todo esto como un gran reto y ya nos organizaremos conforme avancemos. Veremos qué cambios habrá que hacer conforme caminemos”, agregó el nuevo coach.
Rosas describió el domingo como un “día alocado para todos los involucrados” y calificó la decisión de despedir a Saunders como “complicada”, pero señaló que se tomó durante el fin de semana.
La directiva de los Timberwolves comenzó el proceso de encontrar al sustituto desde la mitad de la temporada, pero estaba insegura hasta que Toronto dio permiso de entrevistar a Finch para el nuevo papel, lo que pasó hasta la tarde del domingo e hizo que se tomara la decisión de despedir a Saunders tras la derrota ante los Knicks.
El acuerdo con Finch se finalizó la mañana del lunes.
Rosas dijo que los Timberwolves analizaron soluciones internas como David Vanterpool y Pablo Prigioni en el staff, pero fueron realistas en términos de la marca del equipo y Rosas no sintió que no tendrían el cambio real que necesitaban sin ser “atrevidos y directos con la oportunidad”.