LOS ÁNGELES -- Emoción, nervios y dramatismo se vivieron la noche del miércoles en Dodger Stadium para el juego de comodín de la Liga Nacional entre Los Angeles Dodgers y St. Louis Cardinals. Los angelinos vencieron 3-1, rompiendo el empate hasta la novena baja con un cuadrangular de dos carreras de Chris Taylor para dejar tendido al rival.
“(Estaba) Un poco nervioso porque estaba apretado el partido, pero tuvimos fe en nuestros peloteros, estuvimos enfocados en animar al equipo y salió lo que queríamos”, dijo el lanzador Brusdar Graterol, quien subió al montículo por espacio de una entrada.
Dodgers tuvo que echar mano del bullpen para mantener a raya a la ofensiva de los visitantes con seis lanzadores distintos.
“Ya que (el manager) me dio la oportunidad, vamos a dar todo lo que puedo dar”, fue lo que pasó por la cabeza de Graterol cuando fue llamado a lanzar.
Contrario al año pasado en la ronda de comodín, en un formato distinto debido a pandemia en el que los angelinos disputaron dos juegos en casa frente Milwaukee Brewers con estadio vacío, ahora, Dodger Stadium vivió un ambiente inmejorable con casa llena. Más de 53 mil espectadores alentaron a su equipo y presenciaron una emocionante victoria.
“No sé cómo decirlo, fue algo increíble, lo importante fue que ganamos”, agregó el pelotero venezolano.
Ahora, Dodgers iniciará la Serie Divisional frente a San Francisco Giants el viernes, en una gran rivalidad de la Costa Oeste. Giants y Dodgers fueron los dos equipos con mejores récords de temporada regular de MLB con 107 y 106 victorias respectivamente.
“Se verá cuando estemos con ellos en el terreno, son un buen equipo también, igual que nosotros y estamos aquí para ganar igual que ellos”, finalizó Graterol.
El mexicano Julio Urías abriría desde la lomita el sábado para el Juego 2 de la Serie frente a Giants en San Francisco, y Walker Buhler estaría en el primero, mientras que Max Scherzer, el pitcher de esta noche ante Cardinals, reaparecería el lunes para el Juego 3 cuando la serie regrese a Los Ángeles.